(CNN Radio Argentina)– El abogado laboralista Julián de Diego advirtió este martes en CNN Radio que las empresas que sobrevivan a la pandemia deberán adaptarse a las nuevas circunstancias e interpretar “este proceso de transformación” comercial que privilegió el sistema digital por la cuarentena.
“Si las empresas no interpretan este proceso de transformación se van a fundir porque no interpretaron las necesidades de los clientes”, sostuvo el especialista en Café con Pepe.
De Diego puso como ejemplo el sistema de “delivery” implementado en el marco del aislamiento social por los distintos comercios y afirmó que “si no mantienen” este sistema “se van a fundir”.
“También van a tener que tener la mentalidad, en especial las Pymes, de adecuarse a las nuevas costumbres y las nuevas modalidades de trabajo que le han impuesto las circunstancias. Y, si no lo hacen, se van a quedar sin clientes porque el cliente se acostumbró a que todo le llegue a su casa”, expuso.
El experto dijo que “no hay ninguna duda que el coronavirus ha generado una parálisis de la economía” y precisó que “la parálisis es obvia porque el 70 por ciento de la actividad económica está prácticamente sin facturar, sin producir, sin realizar ningún tipo de operación”.
Y añadió: “Tenemos empresas de todos los tamaños que no tienen actividades desde el 20 de marzo y eso significa no producir, no facturar, no tener ingresos”.
Un mercado paralizado
De Diego que “la parálisis del mercado ha producido mucho daño” y señaló que “la mayoría de las empresas ha tratado de congelarse, de tratar de colocarse en una situación donde tenga una salud más o menos razonable para que en el momento de la reactivación se pueda reactivar”.
“El mercado está totalmente resentido. La gente solo atiende gastos de necesidades primarias, como alimentación, bebidas , medicinas y artículos de limpieza. pero el resto está paralizado”, indicó.
De Diego dijo que el daño aún no se puede medir y afirmó que las empresas deberán recibir una nueva ayuda del gobierno para pagar el aguinaldo. “Quienes no reciban la ayuda van a tener que buscar mecanismos de ayuda”, apuntó.
El especialista añadió que “la economía en negro seguramente creció porque cuando hay situaciones dramáticas como esta el refugio de la economía, sobre todo de las Pymes, tiene que ver con operar en la clandestinidad. Este fenómeno ya la vivimos con la crisis del 2001 y 2002 donde la economía en negro llegó al 50 por ciento”, indicó.
Para De Diego, “vamos a entrar en una economía de sombras hasta que vuelva la actividad. Va a haber muchas actividades que van a tener una recuperación rápida, la que tiene que ver con la economía primaria. Y hay otros que van a tener un desarrollo muy lento. Vamos a tener que transitar todo el resto del año en un proceso de daño y vuelta a la normalidad y probablemente en el primer semestre del año próximo vayamos a encontrarnos en una economía que va a desarrollarse de nuevo”, concluyó.