El gobierno de Estados Unidos lanzó una iniciativa para evitar las estafas contra inmigrantes sin residencia legal que buscan regularizar su estancia en el país.

Con un programa que se aplicará en por lo menos siete ciudades, las autoridades nacionales buscan acabar con asesores migratorios sin licencia que cada año ganan miles de dólares prometiendo regularizar el estatus migratorio de muchos latinoamericanos.

La base de la iniciativa es divulgar que en Estados Unidos, sólo abogados certificados tienen autorización para echar a andar un proceso de regularización migratoria.

“En Latinoamérica un notario es un abogado con un puesto muy importante, en Estados Unidos no existe eso”.

Las autoridades estadounidenses trabajan para que los inmigrantes denuncien los fraudes sin miedo a ser deportados, pues aseguran, pese a no tener residentes legales, no habrá ninguna acción en su contra.