Por David Frum
(CNN) – El martes pasado, en el debate republicano que organizó CNN sobre seguridad nacional en los EE.UU., el expresidente de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich reconfirmó su política inmigratoria de larga data:
– Un compromiso a mejorar la seguridad en las fronteras.
– Un programa de trabajadores temporales/visitantes.
– Presentaciones ante la corte para cada uno de los alrededor de 12 millones de ilegales, y para aquellos con larga permanencia y lazos en el país, se les otorgaría derecho a residencia.
– La no concesión de ciudadanía para quienes entraron ilegalmente.
A primera vista, este programa es inviable. Examinemos cada punto paso a paso:
¿Por qué la frontera?
La frontera es el lugar incorrecto para detener a la inmigración ilegal, porque una seguridad más estricta no pararía al 45% de la población ilegal que entra al país legalmente y se quedan con las visas vencidas, según estimaciones del Comité de Seguridad Nacional del Senado.
El lugar correcto para parar la ilegalidad es el lugar de trabajo. Si los empleadores se enfrentan a un requerimiento efectivo para contratar solamente a trabajadores legales, y se establecen significativas penalidades por no cumplir la ley, estaríamos cambiando la estructura que crea el problema. Así es que los empleadores son castigados sólo si es que pueden demostrar que han empleado a mano de obra ilegal “a sabiendas”, lo que significa que mientras que el empleado muestre un número de Seguro Social aparentemente válido, el empleador queda impune. Incluso si alguno es pillado, las multas son de poca monta. Bajo estas circunstancias, se podría desplegar a todo el ejército de EE.UU. en la frontera con México y el impacto para solucionar el problema sería mínimo.
El cumplimiento de las políticas inmigratorias recae en los empleadores, especialmente aquellos en las industrias de salarios bajos como restaurantes, hoteles, cuidado de espacios verdes y la industria frigorífica, cuyas voces son escuchadas por los lobistas de la calle K en Washington.
La seguridad en las fronteras es la política a seguir cuando no se quiere menoscabar a los empleadores. Lo que significa que una política fronteriza es la que se respalda cuando no se quiere que las políticas inmigratorias funcionen.
¿Por qué los trabajadores temporales?
En 2011 los EE.UU. no sufren de escasez laboral. Las cifras de desempleo para los inmigrantes son particularmente malas: la tasa de desempleo entre los latinos es de casi 12% , el desempleo para gente sin un diploma de la secundaria es de casi 14%. ¿Se imagina que el país necesita una población aún mayor de mano de obra de bajos recursos?
Cuando la mayoría de los estadounidenses escucha la frase “trabajador temporal” piensa “trabajos de agricultura”. Pero en proposiciones pasadas, loa idea de trabajadores temporales no han sido tan restringida. Estas propuestas generalmente dicen que cuando un empleador no puede conseguir mano de obra específica a un determinado salario, pueden importar esa mano de obra, y no solo de México (un país de ingreso medio, según estándares mundiales) sino que también de países pobres como Indonesia, Egipto o Vietnam. El único requisito es que el trabajador temporal sea remunerado por encima del salario mínimo de EE.UU.
Los empleadores en industrias difíciles o peligrosas como cuidado de ancianos o reciclado de basura pueden encontrar estadounidenses que hoy harán trabajos muy pesados por muy poco salario. Pero esos empleados no estarán necesariamente agradecidos por la oportunidad y sabrán que pueden renunciar sin necesidad de dejar el país.
La política de trabajadores temporales es aquella que se respalda cuando la prioridad del mercado laboral es tener mano de obra cada vez más barata y flexible.
¿Por qué las presentaciones ante la corte?
Gingrich recibió un buen aplauso cuando habló de desarraigar al inmigrante ilegal que hace 25 años está en el país, con hijos y nietos que son ciudadanos americanos.
¿Pero cómo se diferencia entre esa persona el inmigrante ilegal que ha estado en el país por 20 años? ¿o dos años? ¿o dos meses? Gingrich propone comparecencia individuales ante una corte. ¿Pero realmente 12 millones? En el caso de que cada comparecencia dure una hora, estamos hablando de 1,5 millones de personas por día o 5760 personas por año, contando que la corte apruebe el concepto, lo cual es improbable.
La idea es inviable per se. Se desintegraría rápidamente hacia algo como aprobaciones masivas de ilegales, en otras palabras una especie de amnistía calificada.
Comparecencias ante la corte es la política a respaldar cuando su objetivo es encontrar una forma de amnistía sin usar la palabra.
¿Por qué no a la ciudadanía?
Gingrich propone otorgar a la mayoría de los 12 millones de ilegales, el derecho de vivir y trabajar en EE.UU. pero no la ciudadanía. Esto significa, que no tendrán derecho a voto.
A grandes rasgos, la medida crearía una inmensa clase de trabajadores subordinados. Pero también hará algo más, muy ingenioso políticamente. Los nuevos residentes legalizados de EE.UU. no tendrán razones para esconderse ante el Censo. Serán contados para el del 2020. Estados con un imán para la inmigración como Texas, Arizona y Florida ganarán presencia el en Congreso y en el Colegio Electoral. Pero porque esos residentes no podrán votar, esa gran influencia será manejada por la población de los que son ciudadanos en cada estado. (Entre los 10 estados con mayor población ilegal, solo cuatro son azules [demócratas]: California, Nueva York, Illinois y Nueva Jersey)
Si se le permitiera votar a los ilegales, éstos lo harían en forma predominante para los demócratas. Incluso en el año 2004, con gobierno republicano, los demócratas barrieron con los votantes de menores ingresos.
El no derecho a la ciudadanía es la política a respaldar si se quiere expandir la fuerza labora de bajo costo, mientras se socava el numero de votantes demócratas de bajos ingresos.
¿Hay un forma mejor? Sí y es la presentada por el candidato presidencial republicano Mitt Romney.
1: Cumplimiento de las leyes migratorias en el lugar de trabajo, desalentando a los nuevos inmigrantes ilegales a venir a EE.UU. y alentando a los que ya están a que vuelvan a sus países. Sí, esto incluye a los que han estado por 20 años y no se volverán, y a los que han estado por 20 meses y pudieran volver si es que no encuentran trabajo en EE.UU.
2: Hacer una pausa y valorar la situación. Ver si una política de cumplimiento de la ley reduce y en cuánto la población ilegal. Los mejores estimados indican que la recesión de 2008-2009 devolvió a sus países a 1,7 millones de ilegales.
Un período más largo de cumplimiento de la ley más la remoción de la oferta de amnistía, podría reducir la inmigración ilegal mucho más.
3: Debatir y decidir después y no antes de hacer cumplir la ley, si una propuesta de amnistía es posible. Si una propuesta para tratar el tema de la inmigración es calificada de “humana” es aquella que contempla primero la preocupación por el estancamiento de los salarios de los estadounidenses.
Nota del editor:David Frum, colaborador de CNN, se despempeñó como asistente especial del Presidente George W. Bush del 2001 al 2002. Es autor de seis libros, incluyendo “Comeback: Conservatism That Can Win Again”, (El regreso: conservadurismo que puede ganar otra vez) Además es el editor de FrumForum.