Personal les permite a los usuarios guardar información de múltiples sitios y para que luego decidan con quién la quieren compartir.

Por  Doug Gross, CNN

(CNN) – Es una verdad de la era digital moderna: si estás usando un servicio gratuito en la web, no eres un consumidor. Probablemente eres el producto.

Los sitios que visitamos, los videos que vemos, las compras que hacemos y los ítems que recompensamos con un “like” de Facebook y un “+1” de Google, todo eso, y más, eventualmente se reúne en datos que les permiten a muchas de las más populares compañías en internet conocernos mejor.

Y están usando esa información para ganar miles de millones de dólares.

¿Pero qué pasaría si los usuarios de la web pudieran reclamar su información en línea y beneficiarse, e incluso lucrarse, de ella?

Eso es lo que un grupo de nuevas empresas quieren que ocurra con aplicaciones dedicadas a eso. Dicen que en lugar de darles los datos personales a los gigantes tecnológicos que los usan para mercadeo y publicidad, los usuarios deben recibir algo a cambio.

“Creo que lo que está pasando ahora es que, finalmente, las personas se están volviendo más conscientes de cómo su información está siendo usada”, dijo Shane Green, presidente de la compañía Personal. “Y en el futuro, no van a estar entregando esto así de fácil”.

Con la aplicación Personal, los usuarios pueden importar los datos de sitios como Facebook y LinkedIn y la información de su historial de navegación y de sus compras a una “bóveda de datos”. De ahí, pueden agregar lo que quieran, desde contraseñas de seguridad a información médica, a contactos de emergencia para la niñera.

Una característica de la aplicación incluso les permite a las personas ingresar información de identificación como números de seguridad social, prometiendo que nunca van a tener que gastar tiempo llenando un formulario en línea otra vez.

Desde ahí, los usuarios escogen con quién comparten la información, ya con sea la mencionada niñera, con colegas o con familiares.

Pero Green ve un futuro en el que los usuarios puedan escoger si comparten la información de manera más pública, a cambio de dinero u otros beneficios.

Así que, por ejemplo, si alguien ha estado buscando sitios para comprar un coche particular, puede escoger si quiere que eso sea conocido públicamente. Los distribuidores de coches que usen la página podrían teóricamente enviar descuentos u ofertas específicas.

“Nos encantaría ver eso filtrado… que muestre los lugares en donde recibes los mejores descuentos, incluso el mejor pago directo”, dijo.

Intrigante, tal vez. ¿Pero será sólo una forma de atraer más correo basura?

“Eso no podría ser más alejado de la visión que tenemos”, dijo Green. “El modelo que va a emerger es uno en el que la gente, en un ambiente más seguro y controlado, permita que se filtre parte de su información y decidan qué tipo de personas podrán contactarlos. Y cuando lo hagan, no sabrán su identidad”.

El problema, al menos hasta ahora, es que los grandes actores de la web como Google y Facebook ya están recibiendo mucha información de manera gratuita.

“La aplicación ganadora todavía no ha aparecido”, le dijo al New York Times William Hoffman, que trabaja en un estudio de información para el Foro Económico Mundial. Pero, dice, eso puede cambiar pronto.

“Podría apostar que en los próximos 12 meses algo grande se volverá popular”, dijo.

Singly, la compañía de Jason Cavnar, no busca que los usuarios reciban un pago directo. De hecho, dice, ni siquiera se necesita cambiar el actual modelo de recolección de información en internet.

“El precio de usar servicios gratuitos no debería ser nuestra privacidad. Pero hasta que haya un mercado de soluciones, no veo que esa tendencia cambie”, dijo Cavner. “Lo que estamos haciendo se trata más de que los datos que uno crean sean útiles”.

Lo que busca Singly es que los desarrolladores puedan crear aplicaciones muy personalizadas que usen esa información.

“Estamos tratando de crear un nuevo impulso a la creatividad, un nuevo impulso a nuevas experiencias”, dijo Cavnar. “Estamos empezando a ver el poder en las apps personales, pero hasta ahora hay muy pocas”.

Green empezó Personal en 2009. En ese entonces, dijo, algunos amigos de la industria tecnológica le dijeron que era un loco, que nunca convencería a la gente de que se preocuparan de cómo su información es usada en línea.

Pero después de tres años, sólo una semana de titulares de prensa dicen lo opuesto. Miembros del Congreso de Estados Unidos y decenas de abogados cuestionaron públicamente la nueva política de privacidad de Google, que reúne datos de muchos de sus productos en un solo perfil del usuario.

El presidente Barack Obama presentó un proyecto de ley sobre los derechos en internet que busca proteger la privacidad de los usuarios en la web y dijo que toda una legislación al respecto se llevará a cabo.

Y en Facebook, que ha estado implicado en controversias por la publicación de datos, algunos usuarios están enfrentando el cambio a una línea de tiempo que temen que hará que su actividad pasada sea muy fácil de ver.

“Creo que es el momento perfecto ahora”, dijo Green. “Pienso que hay una tormenta perfecta pasando en este momento para compañías como las nuestras”.

Para los usuarios de internet de mayor edad, dijo, el miedo siempre fue que alguien los estuviera rastreando en línea y que pudiera hacer algo perjudicial con su información. Ahora con mayor frecuencia los usuarios resienten el hecho de que miles de millones de dólares sean ganados con la información que están proporcionando de manera gratuita.

“Ya ni siquiera se trata del dinero”, dijo. “Se trata de los principios. Y creo que esa es la vena emocional que las personas están sintiendo en este momento”.