LONDRES (CNN) — Rupert Murdoch admitió este jueves que hubo “encubrimiento” del espionaje telefónico en su tabloide insignia y se disculpó por no poner más atención al escándalo que ha convulsionado su imperio mediático y golpeado a la clase política británica.
También admitió que había cerrado el News of the World por “pánico” frente a la furia que despertó entre la población la revelación de que el celular de una adolescente víctima de asesinato había sido espiado.
Murdoch, propietario de Sun y Times in London, y quien también controla el Wall Street Journal, New York Post y Fox News, dijo que News Corp ha sido víctima del encubrimiento, no perpetrador.
“Alguien se hizo cargo del encubrimiento del cual fuimos víctimas, y lo lamento”, dijo ante la comisión de investigación Leveson, que lleva cabo una pesquisa independiente sobre el caso.
Culpó a “uno o dos individuos muy fuertes” en el periódico, pero no dio a conocer nombres.
“También debo decir que yo me equivoqué”, declaró sobre el hecho de que no puso suficiente atención al problema del espionaje telefónico. Tras hacer una larga pausa, añadió: “Y lo lamento mucho”.
El escándalo ha llevado al arresto de docenas de personas, dos investigaciones en el Parlamento y la comisión Leveson, un jurado independiente establecido por el gobierno británico.
Murdoch sugirió que algunos puntos clave del escándalo han sido exagerados.
“El escándalo de espionaje no era un asunto muy importante a nivel nacional hasta la revelación de Milly Dowler”, dijo.
Se refería al caso de la adolescente de 13 años que fue asesinada y cuyo celular fue espiado por trabajadores del New of the World.
El periódico The Guardian originalmente reportó que los hackers también habían borrado algunos correos de voz, lo que había despertado falsas esperanzas de que fuera la propia joven quien estaba eliminando sus correos. De hecho, los mensajes pudieron haber expirado de manera automática.
Murdoch describió este jueves la atmósfera que había cuando se dio a conocer el caso de Milly Dowler en julio del 2011.
“Podías sentir la explosión venir por la ventana. Puedo decirlo de forma sucinta. Me dio pánico. Y lo lamento”, dijo sobre su decisión de cerrar el tabloide. Luego reconoció que debió cerrarlo antes.
“Todo este asunto es una mancha grave en mi reputación”.
Murdoch también fue cuestionado sobre la presión ejercida al gobierno británico para apoyar su imperio mediático. Él respondió que se enteró de la existencia de una de las personas que presionaba “unos meses atrás”.
El magnate dijo que estaba “sorprendido” por el contacto entre el empleado Fred Michel, con el gobierno británico mientras éste evaluaba el intento de News Corp de obtener la propiedad completa de la British Sky Broadcasting.
El negocio fracasó debido al escándalo de espionaje telefónico.
“Ustedes lo llaman presión, yo lo llamo buscar información”, dijo Murdoch a la comisión Leveson. “No veía nada malo en estas actividades. Me sorprendió que haya durado tanto tiempo, que hubiera tantos correos electrónicos”.
Un asesor del gobierno renunció este miércoles tras darse a conocer la magnitud del contacto que tenía con el imperio de Murdoch y hay quienes han exigido la renuncia del secretario de Cultura, Jeremy Hunt.
Murdoch pasó varias horas explicando este miércoles su influencia política. El propio primer ministro británico, David Cameron, aseguró que los políticos habían estado demasiado cerca del empresario.
Además, insistió en que nunca le había pedido nada al primer ministro e hizo un recuento de las relaciones que ha tenido con los mandatarios, desde Margaret Tatcher.
El magnate de los medios también negó que usara la influencia de su prensa para obtener beneficio personal.
Al mismo tiempo, Cameron dijo que los políticos de varios sectores habían estado demasiado cerca de Murdoch.
James Murdoch, hijo de Rupert, testificó este martes que antes de que Cameron se convirtiera en primer ministro se había reunido con el político en un bar y le había dicho que el periódico Sun apoyaría a su partido Conservador en la próxima elección.
James insistió en que sabía poco sobre el escándalo de espionaje telefónico.
Este caso ha forzado a News Corp a pagar cientos de miles de libras en compensación a las víctimas.