El Cairo – (CNN) — El Parlamento electo de Egipto se reunirá este martes, informó un portavoz del Partido Libertad y Justicia este lunes, mientras que la Alta Corte Constitucional del país insistió en que su decisión de disolver el organismo era definitiva.
El recién electo presidente egipcio, Mohamed Morsi, anunció el domingo que reemplazaría el edicto militar que disolvía el Parlamento y llamó a los legisladores a una nueva sesión.
La decisión desafía a los generales que llevan las riendas del país desde la revolución de 2011, que derrocó al antiguo hombre fuerte del país, Hosni Mubarak.
La Suprema Corte disolvió el Parlamento en junio y pidió a los militares egipcios que asumieran el poder legislativo. La Corte determinó que los artículos constitucionales que regulan las elecciones parlamentarias no eran válidos. El tribunal es el único organismo que puede anular un decreto presidencial.
Se espera que la decisión de Morsi complazca a los partidarios del presidente en la Hermandad Musulmana, quienes ganaron el mayor número de escaños en las elecciones parlamentarias de este año. Sin embargo, lo sitúa en una situación complicada con los militares y los expertos constitucionales.
El Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas se reunió durante cinco horas este domingo, pero no dieron a conocer ningún comunicado. El portavoz del Consejo, el teniente coronel Mohamed Askar, dijo que la decisión de Morsi y “sus repercusiones” serían discutidas en la reunión de emergencia.
Decenas de policías antidisturbios y vallas de protección ya están colocados alrededor del edificio parlamentario de cara a la reunión de los legisladores de este martes, dijo Ahmed Sobea, el portavoz del Partido Libertad y Justicia. La Hermandad Musulmana llamó a una protesta de un millón de personas este martes en apoyo a la decisión de Morsi, añadió Sobea.
Morsi, el primer líder egipcio elegido libremente, asumió la presidencia el 30 de junio y tomó las riendas de un país dividido, con problemas económicos y que carece de un gobierno funcional.
El primer mandatario dijo que el poder legislativo regresaría a los civiles, alabó a los generales e indicó que su trabajo era “proteger la frontera y la seguridad del país”.