Por Alex Felton
(CNN) — Una gran base militar británica ubicada en una de las zonas más peligrosas de Afganistán tuvo una sorpresa esta semana cuando una soldado dio a luz a un bebé.
El Ministerio de Defensa británico no permite la participación de mujeres en operativos si están embarazadas, pero la dependencia desconocía esta situación.
El Ministerio se negó a confirmar reportes de medios británicos de que la soldado no sabía que estaba embarazada.
La madre y el bebé en Camp Bastion se encuentran en condiciones de salud estables en un hospital, de acuerdo con la dependencia.
Es la misma instalación donde reside el príncipe Enrique como piloto de helicóptero Apache, en la región Talibán de Helmand.
El Ministerio dijo que el bebé nació este martes, cuatro días después de un ataque a la base por parte de insurgentes entrenados que vestían uniformes militares estadounidenses.
Los insurgentes, en equipos de cinco, infiltraron el complejo y mataron a dos soldados estadounidenses, destruyeron seis aviones y dañaron otros antes de que fueran detectados y la mayoría asesinados. Un atacante resultó herido y capturado, según la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad (ISAF, por sus siglas en inglés).
Un equipo médico del hospital John Radcliffe, en Oxford, Inglaterra, se prepara para viajar a Afganistán para cuidar a la madre, anunció este jueves el hospital.
La madre y el bebé regresarán a Gran Bretaña para recibir cuidados médicos, según el Ministerio.
Tampoco fueron confirmados reportes de que el bebé fue nombrado Sebastian, ni se reveló el nombre de la madre, que según diarios británicos es una artillera.