LONDRES (CNN) — La prensa británica debe tener un regulador independiente con poder para imponer multas, recomendó este jueves el juez Brian Leveson en el esperado reporte de una investigación lanzada tras el escándalo de las escuchas telefónicas del tabloide News of The World, de Rupert Murdoch.
El juez Leveson dijo que no recomendó que el Parlamento apruebe un cuerpo regulador, sino que la industria desarrolle su propio regulador, apoyado por la ley.
“La legislación no debe de establecer un cuerpo para regular a la prensa: debe de quedar en la prensa presentar su propio cuerpo regulador”, dijo a reporteros en Londres.
Leveson dijo que la relación entre la prensa y los políticos es mayormente “robusta” pero que algunas veces los vínculos son “muy cercanos”.
Resaltó como una preocupación “la relación entre responsables políticos y la gente en los medios que tienen que ganar o perder” con algo que esté discutiéndose en el entorno político. Esto puede ser un riesgo a perder confianza pública en la prensa y los políticos, dijo.
El juez afirmó que con su recomendación no desea poner en peligro la libertad de la prensa, la cual juega un papel “importante” en la salvaguarda del interés público, pero que son necesarios cambios para hacer frente a abusos.
La prensa británica ha ignorado su propio código de conducta “en demasiadas ocasiones en la última década”, lo que ha causado “estragos en las vidas de personas inocentes”, según el juez.
“Eso no solo en caso de famosos, sino también en gente ordinaria que ha quedado atrapada en acontecimientos, muchos de ellos verdaderamente trágicos” que les es difícil manejar a los que se les agrega a veces un comportamiento de la prensa ‘escandaloso’”, dijo.
El primer ministro británico David Cameron respaldó el reporte del juez Leveson y la instalación de un regulador, pero dijo tener preocupaciones con respecto al pedido de legislación para la formación de un nuevo regulador y pidió explorar otras opciones primero.
La investigación Leveson escuchó testimonio de cientos de testigos durante ocho meses de audiencias.
Testificaron políticos, incluyendo al primer ministro David Cameron y a los exprimeros ministros Tony Blair y Gordon Brown, al igual que la policía, gente de medios como Rupert Murdoch, así como víctimas de abuso de la prensa.
La investigación fue anunciada por Cameron en julio de 2011 en respuesta a la indignación pública por las escuchas telefónicas del News of The World, lo que causó el cierre de la publicación, que tenía 168 años de imprimirse.
El reporte de Leveson era muy esperado y estuvo sujeto a mucha especulación. Defensores de la libertad de expresión advirtieron sobre un posible impacto, mientras que quienes han hecho campaña por más controles han dicho que la regulación es esencial.
Jonathan Wald y Dan Rivers contribuyeron con este reporte.