(CNN) – En un esfuerzo por reducir los accidentes de tránsito provocados por el consumo de alcohol, la Junta Nacional de Seguridad del Transporte de Estados Unidos (NTSB, según sus siglas en inglés) propuso este martes bajar los niveles permitidos de alcohol en sangre para los conductores.
El organismo sugirió que los 50 estados disminuyan el nivel permitido de 0,8 a 0,5 gramos por litro de sangre.
La idea forma parte de una iniciativa orientada a eliminar los accidentes viales relacionados con el consumo de alcohol, responsables unas 10 mil muertes cada año en el país.
“Es algo crucial; el manejo en estado de embriaguez es uno de los mayores asesinos en los Estados Unidos”, dijo Debbie Hersman, presidenta de la junta.
Hersman admitió avances en la materia en los últimos años, incluyendo varias políticas federales y estatales, un mayor control por parte de las autoridades y una mayor conciencia desde la sociedad. Sin embargo, reconoció que son todavía muchas las muertes en el país por accidentes relacionados con el consumo de alcohol.
El organismo de transporte asegura que reducir el índice a 0,5 salvaría entre 500 y 800 vidas por año.
“En los últimos 30 años, más de 440 mil personas han fallecido en los Estados Unidos por la conducción alcoholizada. ¿Cuál será nuestro legado dentro de 30 años?”, se preguntó Hersman. “Si no atacamos al problema hoy, ¿cuándo tendremos la voluntad para hacerlo?”.
Según la legislación actual, un hombre que pesa 80 kilos alcanzará el nivel de 0,8 luego de tomar unos cuatro tragos en una hora, según una investigación de la Universidad de Oklahoma. La misma persona superaría el índice de 0,5 después de dos o tres tragos en el mismo período.
La NTSB investiga accidentes de tránsito y aboga por la seguridad vial. No tiene la facultad de imponer su voluntad a través de regulaciones y solo puede sugerir cambios ante las agencias federales y estatales y las legislaturas, incluyendo el Congreso.
La junta también recomendó este martes que los estados amplíen sus leyes y les permitan a los policías confiscar las licencias de los conductores que superen los niveles permitidos de alcohol en sangre.
En los años 80, cuando la atención pública se centró en la conducción alcoholizada, varios estados impusieron un nivel de 1,5 para demostrar intoxicación.
En las décadas siguientes, organizaciones como las Madres Contra la Conducción Alcoholizada presionaron a los estados a adoptar el estándar de 0,8.
La cifra de muertes causadas por el alcohol al volante cayó de 20 mil en 1980 a 9878 en 2011, precisó la NTSB.
En los últimos años, un 31 por ciento de los accidentes fatales en autopistas fueron atribuidos al alcohol al volante, dijo el organismo.
“Creo que el índice de 0,5 será una realidad. No sabemos cuánto tardará, pero llegará”, dijo Robert Molloy, miembro de la NTSB.
La junta señaló que incluso niveles bajos de alcohol en sangre afectan el manejo.
Con 0,1, los conductores demuestran problemas de atención y desviación de los carriles. Con 0,2 exhiben somnolencia y con 0,4 problemas de vigilancia.
La NTSB hizo públicas sus recomendaciones en una fecha especial. El 14 de mayo de 1988 un conductor alcoholizado estrelló su camioneta contra un autobús escolar, matando a 24 niños y tres adultos y lesionando a otras 34 personas.