(CNN) – El actor mexicano Eugenio Derbez se arriesgó y lo logró.
Debutó como director de cine en la película No se aceptan devoluciones y con un guión inteligente y sorpresivo hizo historia al convertirse en el mejor estreno para una cinta hispana en Estados Unidos.
La cinta, que narra las aventuras de un playboy convertido por necesidad en padre responsable por las circunstancias, fue pensada como “una historia totalmente universal”, no solo para los mexicanos o latinos.
Tras el éxito, la exhibición de las cinta se duplicó en el número de salas disponible originalmente en Estados Unidos, con lo que llegó a 717, además de 45 nuevas ciudades.
En entrevista con Mercedes Soler en Notimujer, Derbez dijo que el éxito se lo debe a los latinos en Estados Unidos.
La cinta, que tuvo un coste de producción de 5,5 millones de dólares, también se volvió del interés de distribuidores en América Latina y Europa, donde fue comprada para su difusión.
Con información de Jorge Eduardo Gómez de CNNMéxico.com