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Por Jason Hanna, Laura Smith-Spark y David McKenzie, CNN

(CNN) – Samantha Lewthwaite, nacida en Gran Bretaña, fue considerada una especie de víctima de los ataques terroristas en Londres en julio de 2005: era la esposa embarazada de uno de los atacantes suicidas que mataron a 52 personas y que ahora se encontraba sola para cuidar a sus hijos.

Condenó los ataques, pero luego desapareció. Ahora, según las autoridades de Kenya, es la tristemente célebre Viuda Blanca, quien presuntamente es simpatizante y financiera de personas vinculadas con el grupo terrorista somalí al Shabaab.

Los reportes de que una mujer blanca estaba entre los terroristas que atacaron el centro comercial Westgate en Nairobi, operación que se ha adjudicado al Shabaab, han generado toda una serie de especulaciones de los medios en el sentido de que ella pudo haber estado involucrada. Sin embargo, no se ha dado una confirmación oficial.

Lewthwaite, una mujer blanca que nació en Buckinghamshire, Inglaterra, se ganó su apodo como Viuda de Germaine Lindsay, uno de los cuatro suicidas que atacaron el sistema de transporte londinense el 7 de julio de 2005.

Lewthwaite conoció a Lindsay, un musulmán británico, cuando tenía 17 años, de acuerdo con el Daily Mail. Se convirtió al islam y se casó con él en 2002. Ahora tiene 29 años. Después de los ataques de Londres, negó haber tenido conocimiento de los planes. Más tarde, según las autoridades kenianas, apareció en la ciudad portuaria keniana de Mombasa y se convirtió en parte de una célula terrorista vinculada a al Shabaab.

En diciembre de 2011, las autoridades de Kenya hicieron una redada en tres casas de Mombasa, incluyendo una que supuestamente utilizaba Lewthwaite y arrestaron a algunas personas por ser sospechosos de planear la destrucción de un puente, un ferry y hoteles frecuentados por turistas occidentales.

En la residencia de Lewthwaite, los investigadores encontraron el tipo de materiales para fabricar bombas que se utilizaron en los ataques de Londres, dijo la policía antiterrorista de Kenya. Sin embargo, Lewthwaite nunca apareció.

Un guardia de seguridad que habló con CNN bajo condiciones de anonimidad en 2012 dijo que vio a una mujer blanca salir de la residencia horas antes de la redada. Las autoridades todavía tienen que encontrarla.

Las autoridades de Kenya también sospechan que Lewthwaite planeaba ayudar a su compañero británico Jermain Grant a escapar de la cárcel después de que fue arrestado en conexión con el supuesto plan de Mombasa.

Una persona joven e inocente

En el pueblo inglés de Aylesbury, en Buckinghamshire, donde Lewthwaite vivió con Lindsay durante algún tiempo, el concejal local Raj Khan la recuerda como una mujer buena y servicial. “Era una mujer joven e inocente”, dice Khan, que asegura que conoció a Lewthwaite como una “amiga de la familia” antes de los bombardeos de julio de 2005.

Advirtió que no se le debería juzgar con base en rumores y especulaciones. “Me preocupa que el retrato que la ha estado satanizando pueda ser prematuro porque no ha sido fundamentado”, dijo. “A menos que haya evidencia concreta no deberíamos hacer conjeturas innecesarias”.

También se dice que Lewthwaite pasó un tiempo en Banbridge en Irlanda del Norte, donde su abuela, Elizabeth Allen, vive todavía. De acuerdo con el Belfast Telegraph, el padre de Lewthwaite fue un soldado británico apostado en el área que se casó con una mujer del pueblo.

Muy extraño

Los funcionarios de Kenya han ofrecido recuentos contradictorios sobre el involucramiento de una mujer blanca en el ataque al centro comercial Westgate.

Altos funcionarios de inteligencia en Kenya dijeron a CNN que el video de vigilancia del interior del centro comercial parecía mostrar a dicha mujer participando en el ataque. Los analistas creen que es británica, dicen las fuentes.

La ministra de Relaciones Exteriores de Kenya, Amina Mohamed, dijo a PBS NewsHour el lunes que una mujer británica era parte de los atacantes. “Creo que ha hecho esto muchas veces en el pasado”, dijo refiriéndose a la mujer, aunque no nombró a la sospechosa.

Sin embargo, el ministro del Interior de Kenya Joseph Ole Lenku dijo a los reporteros que todos los atacantes eran hombres. Algunos de ellos aparentemente iban vestidos de mujer, dijo.

El involucramiento de mujeres en un ataque de esta naturaleza sería “muy extraño”, dijo el analista de seguridad de CNN Peter Bergen. “Normalmente, estos grupos son misóginos”, dijo. “Su visión es que la mujer debe estar en casa y envuelta en un velo”.

Claudia Rebaza, Matthew Chance y Peter Taggart, de CNN, contribuyeron con este reporte.