GINEBRA (CNN) – Después de un día de demora y encuentros amargos, las contrapartes de Siria se encontraron en la misma habitación este sábado, pero no estaban preparadas para hablar entre sí. La conferencia de paz que busca poner fin a los tres años de guerra civil, donde han muerto al menos 100.000 personas, casi fracasa el viernes, el día en que estaban programadas las reuniones cara a cara.
El diálogo fue reanudado después de que Lakhdar Brahimi, un mediador de la ONU, se reuniera con las delegaciones del gobierno sirio y la oposición por separado y ambas acordaran que él fungiera como intermediario.
La primera de dos sesiones este sábado, en la que Brahimi hizo una declaración, concluyó tarde durante la mañana en Ginebra, Suiza. De acuerdo con la televisión siria, Brahimi habló sobre la necesidad de encontrar puntos comunes entre ambas partes.
“La mesa está en forma de U. Tenemos un mediador y cada delegación hablará solo con el mediador, no hablaran entre ellos”, dijo a los reportes, Monzer Akbik, un delegado en el grupo de oposición, la Coalición Nacional Siria.
Cuando le preguntaron si estaría dispuesto a hablar directamente con la otra parte respondió: “Justo ahora así es como está el proceso y así se está haciendo. No hubo saludo de mano”.
Dijo que la siguiente sesión está programada para la tarde. “Creo que todos sabemos que tenemos asuntos humanitarios y asuntos de transición (…) Puedo asegurarles que durante esta ronda de negociaciones que continuará durante la semana, serán discutidos ambos temas, negociados”, dijo Akbik .
Las pláticas de paz de Siria continuarán el domingo y se enfocarán en temas de “prisioneros y gente secuestrada para ver si se puede hacer algo para asegurar la libertad, no de todos, pero de algunas personas que han sido privadas de su libertad”, dijo a los reporteros Lakhdar Brahimi, mediador de Naciones Unidas este sábado en Ginebra.
Luego de la corta reunión, el vocero del Departamento de Estado, Edgar Vasquez dijo que la oposición “había demostrado seriedad de propósito”.
“Todos (los miembros) de la oposición quienes dijeron que vendrían llegaron. Fueron a la reunión de esta mañana con la intención de participar de manera constructiva”, dijo Vasquez.
Un proceso frágil
La fragilidad del proceso ha sido clara desde que ambas partes llegaron a Suiza esta semana.
Más temprano el sábado, el embajador de las Naciones Unidas en Siria, Bashar Jafari, dijo a los reporteros que la delegación del gobierno sirio llegaba a las pláticas con “una mente abierta… para tratar de romper el hielo”.
En comentarios hechos a la televisión siria estatal, minimizó las pláticas sobre que las negociaciones están basadas en al acuerdo de Ginebra I, que pide un gobierno de transición y la deposición al cargo del presidente Bashar Al Assad.
“Desde el primer día dijimos que teníamos reservas a las pláticas de Ginebra I y estamos sorprendidos del comportamiento infantil de la llamada oposición, quienes intentan forzarnos a aceptar eso, cuando no lo hicimos”, dijo el ministro de Información sirio, Omran Al-Zoubi.
Mientras que los resultados esperados de la plática son altos, los observadores ven poco probable que la conferencia encuentre un fin a la violencia en Siria. Pero los analistas dicen que hay esperanza de que se pueda progresar en mejorar la situación de las victimas más vulnerables de la guerra civil.
La Coalición Nacional Siria no representa a todos los grupos de oposición en Siria, lo que hace incierto que cualquier acuerdo alcanzado en Ginebra se respete.