(CNN Español) – A pocos días de las elecciones presidenciales en Colombia, Juan Manuel Santos busca convencer al pueblo colombiano que su gobierno merece la reelección y que el actual proceso de paz con las FARC en La Habana va por buen camino.
En entrevista con Andrés Oppenheimer, Santos rechazó las afirmaciones de sus opositores que dicen que le está “entregando” el país a esa guerrilla.
“Mienten flagrantemente. ¿De dónde diablos sacan lo de la entrega del país al castrochavismo?”, dijo Santos. “No tiene ni pies ni cabeza”.
“Mis críticos lo único que han hecho es sembrar mentiras para que subsista el miedo en Colombia y subsista el escepticismo sobre la posibilidad de que tengamos éxito en el proceso de paz”.
Según Santos, “estamos cada vez más cerca” del fin de esas negociaciones, “y eso sería para Colombia lo mejor”, dijo.
El candidato-presidente además dijo que confía en su victoria en las elecciones. Santos se enfrenta, entre otros, a Enrique Peñalosa, exalcalde de Bogotá, y a Óscar Iván Zuluaga, del Centro Democrático, el partido del expresidente Álvaro Uribe Vélez, su antiguo jefe y aliado y hoy su principal opositor.
Recientes encuestas indican que Santos no ganará la reelección en la primera vuelta, y en una eventual segunda vuelta con Zuluaga sería una contienda cerrada.
Santos calificó a la economía colombiana como “la más sólida de Latinoamérica”.
El principal estratega de la campaña para la reelección del presidente colombiano Juan Manuel Santos, Juan José Rendón, renunció a su cargo tras un escándalo por la supuesta mediación para la entrega de siete narcotraficantes en 2010, por la que se habrían pagado 12 millones de dólares.
Por su parte, la fiscalía colombiana asegura contar con pruebas que apuntan a que los correos electrónicos del presidente Juan Manuel Santos fueron interceptados. El principal sospechoso es Andrés Fernando Sepúlveda, quien fue arrestado en Bogotá y quien además estaría involucrado en la interceptación de comunicaciones de los negociadores del proceso de paz con las FARC. Se supo que Sepúlveda y su esposa trabajaban como asesores en la campaña presidencial del candidato opositor Óscar Iván Zuluaga.
Un asesor de Zuluaga se retiró de la campaña luego del escándalo.