Por Lauren Said-Moorhouse
(CNN) — “¡Caramba! Mira ese horizonte. Es un poco curvo y las nubes están muy abajo. Me pregunto, ¿cómo se verá la imagen?”, recuerda el famoso astronauta, Buzz Aldrin.
Quizá sea mejor conocido por ser la segunda persona en caminar sobre la luna, como parte del aterrizaje lunar Apolo de 1969, pero sin saberlo, Aldrin hizo historia cuando en 1966 tomó la “primera selfie en el espacio”. Tomada mientras estaba en la 10ª y última misión Gemini (Gemini 12), Aldrin le reveló a CNN la historia detrás de la selfie.
“No me di cuenta que estaba siendo el primero en tomar selfies”, dice con su usual entusiasmo inocente.
“Estábamos acoplados a la otra nave espacial, Agena. Un experimentador de la Universidad Northwestern quería que se tomaran fotografías de las estrellas ultravioletas. Así que solo podíamos tomar fotografías por la noche”.
Y añade: “Durante el día, miraba hacia abajo al astródomo, a algunos de los lagos cerca de Houston, así que ¿qué iba a hacer durante el día? Ver la cámara y pulsar el botón”.
Y eso fue todo. Aldrin había tomado lo que según él es la “primera selfie en el espacio”.
Actualmente es la norma y la NASA se ha vuelto increíblemente buena en compartir con el mundo las mejores fotos en los medios sociales.
Pero no son solo los astronautas. Los científicos e ingenieros también se están sumando a la acción, por medio de robots y orbitadores que se trasladan de un lado al otro de la galaxia y toman alegres instantáneas de sus entornos alienígenas. Desplázate por la galería de arriba para ver más.
Mientras tanto, casi 50 años después, Aldrin reflexiona sobre su otro “primer” logro y admite que tomó la foto pionera por aburrimiento.
“¿Para qué? No lo sé. Me preguntaba cómo me veía. Una razón más para que Buzz se volviera famoso”, dice inclinándose hacia adelante con una atrevida sonrisa en su rostro.