Por Will Ripley y Victoria Butenko
(CNN) — Un número indeterminado de civiles, entre ellos mujeres y niños, murieron en un ataque a una caravana de refugiados en la región de Lugansk, al este de Ucrania, informó este lunes el ejército de ese país.
Los civiles estaban tratando de escapar de los combates entre los rebeldes prorrusos y los militares de Ucrania, pero no estaban en un corredor humanitario de seguridad establecido cuando fueron atacados, dijo un representante militar.
Los civiles estaban siendo escoltados por el ejército ucraniano de las ciudades de Khryaschuvate y Novosvitlivka cuando fueron atacados a las 09:40 horas (local), mencionó el gobierno regional de Lugansk.
Un representante gubernamental confirmó que hubo “un intenso tiroteo” en la zona y que las víctimas habían sido incapaces de pedir ayuda debido a la caída de las torres de telefonía celular.
El coronel ucraniano Andriy Lysenko confirmó a CNN que “terroristas” habían atacado el convoy con armas procedentes de Rusia.
En las pasadas 24 horas hubo unas 25 batallas en los intentos de las fuerzas del gobierno por recuperar parte de la ciudad de Lugansk, dijo Lysenko. “Lugansk está casi totalmente rodeada, y la operación para liberarla está pasando en este momento”.
Los rebeldes habían utilizado lanzacohetes por primera vez, dijo Lysenko.
El domingo las fuerzas ucranianas reportaron avances frente a los rebeldes, y el ejército había entrado en Donetsk y levantado la bandera de Ucrania frente a las oficinas de la policía del distrito.
Fuerzas ucranianas también recuperaron el control de la estratégica ciudad de Yasynuvata en Donetsk, en la parte sureste del país, según la cuenta oficial del presidente Petro Poroshenko.
Mientras tanto, las agencias humanitarias dicen que miles de personas en la región no tienen acceso al agua, electricidad y ayuda médica adecuada.
Funcionarios ucranianos reconocieron el domingo pasado que un convoy de más de 260 vehículos rusos en la frontera transportaba ayuda humanitaria, según un comunicado en el sitio web del gabinete ucraniano.
Ucrania recibió un inventario de los suministros el sábado, firmado por el jefe del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) regional.
Pero el coronel Lysenko dijo este lunes que la falta de un acuerdo en materia de seguridad con el CICR había impedido una inspección detallada.
El convoy inicialmente generó temores de que Rusia estaba tratando de utilizar un convoy de ayuda humanitaria como una cubierta para el envío de más ayuda y armas para los rebeldes prorrusos en el este de Ucrania, lo cual negaron Rusia y los rebeldes.
Los combates en curso han dejado más de 2,000 muertos y poco menos de 5,000 heridos en el este de Ucrania desde mediados de abril, según estimaciones de Naciones Unidas.
Conversaciones de paz
Los ministros de Relaciones Exteriores de Ucrania, Rusia, Alemania y Francia se reunieron en Berlín el domingo para discutir la crisis en Ucrania.
“Discutimos la cuestión de cómo podemos encontrar la manera de llegar de manera urgente a un alto al fuego en el este de Ucrania”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeier. “Discutimos la cuestión de cómo podemos mejorar y optimizar los controles en la frontera entre Rusia y Ucrania”.
Steinmeir dijo se habían realizado progresos en ciertas áreas y las partes esperan más conversaciones.
El Ministerio de Relaciones Exteriores ruso emitió un comunicado en el que indicó que las conversaciones se centraron en “la más pronta conclusión posible de las hostilidades, el control fronterizo, la entrega de ayuda humanitaria para el sureste de Ucrania, y la creación de las condiciones para el primer principio del proceso de arreglo político”.
“Se han hecho algunos progresos en todos estos temas”, dijo.
Estados Unidos y la Unión Europea han aplicado cada vez mayor sanciones contra los funcionarios rusos, los bancos y otros intereses desde marzo, cuando Rusia se anexó la península ucraniana de Crimea.
El movimiento de Rusia se produjo un mes después de que el parlamento de Ucrania derrocó al presidente prorruso Viktor Yanukovich.
Yanukovich dejó el cargo tras las violentas protestas contra su gobierno en la capital, Kiev. Esas protestas fueron motivadas en parte por su decisión de retirarse de un acuerdo comercial con la Unión Europea a favor de vínculos más estrechos con Rusia.