Por Catherine E. Shoichet y Ashley Fantz, CNN
(CNN) — Los resultados de la muestra de un espécimen en el Hospital Presbiteriano de Salud en Dallas, Texas, “son negativos”, informó este jueves el Departamento de los Servicios de Salud del Estado de Texas.
Horas antes, la dependencia estatal aseguró que darían a conocer los resultados de una prueba que le fue practicada a un asesor del sheriff de Dallas.
El hospital aseguró en un comunicado que sus trabajadores están “aliviados de que el hombre sospechoso de haber contraído el ébola tuviera resultados negativos”. Los doctores determinarán el mejor tratamiento para Monnig para darlo de alta del lugar, informó la institución médica.
El hombre, identificado por los medios locales como el sargento Michael Monnig, estuvo en el departamento de Thomas Eric Duncan, el primer paciente con ébola en Estados Unidos que murió el miércoles en Dallas, Texas, y tuvo “algún contacto” con los miembros de la familia del ahora fallecido, informó el Jefe del Departamento de Bomberos de Frisco, Mark Piland.
El ébola se propaga mediante el intercambio de fluidos corporales.
El hospital donde está siendo atendido Monnig informó que la condición actual del hombre no es consistente con un infectado de ébola.
“En este caso, el riesgo del paciente era extremadamente bajo porque no tuvo contacto con el paciente, pero queríamos tomar nuestras precauciones”, dijo el doctor David Lakey, comisionado de salud de Texas. “Entendemos que hay mucha ansiedad en la comunidad, y esperamos que estos resultados puedan calmar un poco los temores.
Monnig pasó unos 30 minutos en el departamento de Duncan, informó el hijo del paciente a la afiliada de CNN, KTVT. El hombre se despertó el miércoles sintiéndose con dolor y fatiga.
“Con la situación, lo que ha ocurrido, el hombre decidió que sería mejor asegurarse de inmediato de que no tuviera el virus, antes de que lo lamentara luego”, comentó Logan Monnig a KTVT.
La primera víctima por el virus mortal en territorio estadounidense, Thomas Eric Duncan arribó el 20 de septiembre a Estados Unidos procedente de Liberia y comenzó a sentir los síntomas de la enfermedad más adelante.
Acudió por primera vez al Hospital Presbiteriano de Salud de Texas el 25 de septiembre, donde fue enviado a casa con un tratamiento con antibióticos, pero regresó tres días después y fue aislado rápidamente tras dar positivo al ébola.
Las personas que estuvieron en contacto con él son monitoreados en caso de síntomas de la enfermedad.