Por Ronda Elsenbrook
Nota del editor: Ronda Elsenbrook es una dietista registrada en la clínica Kelsey-Seybold. La clínica Kelsey-Seybold y la división de Houston de la American Diabetes Association se han asociado para VENCER la diabetes en noviembre.
(CNN) – Muchos de nosotros salimos a comer más a menudo de lo que nos gustaría admitir. Es muy natural que con nuestros ocupados estilos de vida, en los que no podemos buscar un tiempo de descanso, resultemos subcontratando nuestros alimentos en nuestros restaurantes locales favoritos.
Está bien, salir a comer no es realmente el problema. Es más bien lo que comemos en los restaurantes lo que puede causar problemas de salud. Demasiados carbohidratos, exceso de grasa y demasiada sal puede conducir a obesidad, diabetes tipo 2, hipertensión y problemas de colesterol.
El problema es que los menús de los restaurantes están diseñados para atraer tu sentido del gusto y no para informarte si los alimentos que están anunciando son saludables. Pero estoy aquí para eliminar las conjeturas relacionadas con las comidas fuera de casa.
Los alimentos fritos
Palabras código en los restaurantes: crujiente, tempura, rebozado, crujiente, empanizado, con costra, dorado, crepitante
Si quieres una opción saludable, probablemente no escojas a propósito un alimento frito. Busca palabras como crujiente, rebozado, crocante, empanizado, con costra, dorado, tempura; algunas de estas opciones presentan una doble desventaja en cuanto a tu consumo de calorías, puesto que el alimento se pone a freír con una cubierta adicional a base de carbohidratos.
Los alimentos fritos pueden tener un sabor delicioso, pero tienden a ser altos en grasa y calorías, y las frituras profundas le roban los nutrientes a los alimentos. Una pechuga de pollo de 4 onzas (del tamaño de un mazo de cartas) al horno o asada representará alrededor de 170 calorías, mientras que la selección en fritura profunda representa una enorme cantidad de 370 calorías.
Para empeorar las cosas, muchos restaurantes (por lo general de la variedad de comida rápida) utilizan aceite parcialmente hidrogenado porque puede recalentarse y reutilizarse una y otra vez. El aceite parcialmente hidrogenado contiene grasas trans (la peor de las grasas) que elevan tu LDL (colesterol malo) y disminuyen tu HDL (colesterol bueno), lo que lleva a una mayor incidencia de enfermedades del corazón.
Los alimentos ricos en azúcar
Palabras código en los restaurantes: teriyaki, barbacoa, glaseado, pegajoso, sumergido en miel
Si lees algo como rosquillas con azúcar glass en un menú, fácilmente comprenderás de lo que se trata, pero las opciones etiquetadas como teriyaki, barbacoa, glaseado, pegajoso o sumergido en miel, también pueden ser altas en azúcares añadidos. Es una buena idea preguntar si la salsa en la que tienes interés fue preparada con azúcar, incluyendo aderezos y vinagretas para ensaladas.
También debes tener cuidado con las comidas con alto contenido de carbohidratos. Cuando tu sistema digestivo absorbe los carbohidratos, estos se convierten en glucosa. Los alimentos usuales dentro de este grupo son las pastas, papas y arroz, pero incluso los platillos del menú “saludables” como el cuscús, la quinoa y el “faro”, son altos en carbohidratos y se deben comer con la misma moderación que las opciones tradicionales.
Los alimentos altos en calorías
Palabras código en los restaurantes: cargado, relleno, cremoso, con queso, empalagoso, ahogado, fundido, suntuoso y aterciopelado
Es curioso cómo los adjetivos que describen los alimentos pueden recordar la ley formulada por Pávlov, incluso en el más riguroso fanático de la salud. Ese es el punto. Los alimentos descritos como cargados, rellenos, cremosos, con queso, empalagosos, ahogados, fundidos, suntuosos y aterciopelados desencadenan una “sensación” que se obtiene cuando comes ese platillo particular en el menú. ¡No caigas en la trampa!
Estos “alimentos de consuelo” te pueden recordar un lugar más sencillo en donde un emparedado gourmet brioche de queso a la parrilla puede hacer que todo lo que no debes comer se vea como el platillo correcto a escoger, pero lo único que no podrá verse bien de ninguna manera, es la cantidad de calorías que consumirás en un solo bocado.
Algo que se describe como “cargado” o “relleno” también va a estar cargado o relleno de calorías y seguramente nadie quiere sentirse como un pavo del Día de Acción de Gracias.
Opciones más saludables
Palabras código en los restaurantes: asado, al horno, estofado, a la parrilla, escalfado, frotado, abrasado, a la plancha, al vapor, salteado, condimentado, sazonado
Los chefs en los restaurantes locales de todo el mundo están poniendo de moda lo que los estadounidenses están haciendo al buscar opciones más saludables cuando salen a comer. Los restaurantes que se especializan en los alimentos que son “cocinados por encargo” o que se enfocan en los alimentos de origen local, probablemente tendrán más opciones.
Incluso algunos restaurantes rápidos ocasionales están renovando sus bases y desarrollando nuevos platillos en el menú que no altere tu ingesta de calorías en el día.
Palabras como asado, escalfado, al horno o la parrilla son tus mejores opciones, simplemente no ordenes el filete Entrecôte de 26 onzas a la parrilla. Que no te de pena preguntar sobre los platillos en el menú, y si la información nutricional está disponible, lee todo y elige el platillo que equilibre tu salud con tu deseo de algo sabroso.