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Por Ed Payne y Sara Sidner

(CNN) – La mayoría de los incidentes de violencia vial no van más allá de algunos gritos, unas cuantas palabras duras uno que otro gestos groseros. Todos se desahogan y la vida continúa.

Pero a veces la situación toma un giro trágico.

La semana pasada en Las Vegas, una madre de cuatro hijos fue asesinada en un caso de aparente violencia vial.

La policía dice que Tammy Meyers murió a causa de un disparo en la cabeza después de que un sospechoso la siguiera hasta su casa y abriera fuego. Meyers y el hombre habían discutido más temprano ese día por un incidente vial.

Un estudio publicado en 2010 en el “International Journal of Psychiatry in Medicine” concluyó que un tercio de las personas que participaron experimentaban violencia vial.

Una encuesta de “The Washington Post”, realizada en 2013, indicó que el número de conductores que dicen sentir “un enojo incontrolable hacia otro conductor” se ha duplicado respecto a ocho años atrás. La cifra es de 12%, o más de 1 de cada 10 conductores en la carretera.

Un par de cosas parecen estar empeorando mucho la situación: las cámaras y las armas.

Captado por la cámara

En esta época de redes sociales parece natural documentar todo cuanto sucede en nuestras vidas. Sin embargo, los expertos dicen que tomarle una foto o video a la persona que consideras te ha hecho un daño en la carretera no ayuda en nada.

En un video publicado este mes en YouTube, un hombre en Austin,Texas aparece insultando a una mujer y escupiendo en su parabrisas luego de que ella fotografiara su placa. El hombre fue acusado de conducción imprudente y más adelante se disculpó por su comportamiento.

El mes pasado, una madre de Carolina del Norte comenzó a grabar en vídeo a otro conductor, quien dijo estaba actuando de forma agresiva.

“Esta persona delante de mí está siendo un verdadero…. ahora mismo”, dice en el video.

Un momento después, se ve como el conductor despotrica y golpea la ventana del auto de la mujer: “Eres una estúpida (insulto)”.

“Te estás arriesgando a grabar imágenes de alguien que está enfurecido y ¿podría eso enfurecerlos aún más? Es difícil determinarlo, pero te estás arriesgando”, dijo Jeffrey Spring de la AAA del Sur de California.

“Lo más importante es salir de la situación”, dijo. “No quieres llegar a ese punto en el que hay alguien que está tan enfurecido que no piense en lo que está haciendo”.

Lo que desencadena la situación

Ahora que las armas son solo un poco menos omnipresentes que las cámaras, los conductores se enfrentan a un segundo riesgo mucho mayor en los incidentes de violencia vial.

En 2013, David Kollar conducía por la Interestatal 75 cerca de Lexington, Kentucky, cuando notó a un hombre que conducía imprudentemente entrando y saliendo del carril de emergencia. Sacó su teléfono y empezó a tomar video.

Primero, trató de obtener el número de placa y luego Kollar se puso a su lado para lograr obtener una imagen del conductor. Fue ahí cuando el hombre que conducía el auto bajó su ventana y al parecer le disparó.

Nadie resultó herido, pero aprendió la lección. “Me asusté”, dijo. “Fue una locura”.

A finales del año pasado, una familia apenas salió ilesa cuando un conductor abrió fuego luego de un altercado en la carretera. El pistolero los siguió hasta un centro comercial y empezó a disparar.

El perro de la familia saltó al frente y recibió una bala por la familia.

“Les dispararon y la familia estaba aterrorizada”, le dijo el sargento de la policía de Atlanta, Gregory Lyon, a WXIA, una afiliada de CNN. “Sobrevivieron a eso solo para encontrar que su mascota había muerto”.

Calmando la ira

Así que ¿qué se puede hacer al respecto?

El año pasado, AutoVantage realizó una encuesta de violencia vial. Esta encontró que los conductores en Houston, Atlanta y Baltimore son los menos corteses. En contraste, quienes manejan en Portland, Pittsburgh y St. Louis son los más corteses.

DMV.org ofrece algunos consejos sobre cómo controlar la violencia vial.

Aléjate de los conductores agresivos: no puedes controlarlos, así que dales espacio para operar.

Conoce tu propio estilo de conducción: puede ser que tú seas el chico malo. Quizá tú provocas a los conductores a tu alrededor.

Y este es otro aspecto en el que puedes reflexionar. Nunca sabes quién va detrás del volante en el otro auto.

Quizá simplemente tengan un mal día, o quizá tengan problemas serios.

O podrías encontrarte en una situación como la de un anuncio del servicio público de Georgia, en el que aparecía Evander Holyfield. Un hombre enfadado, quien desafía a un conductor que se le atravesó, se encuentra cara a cara con el amenazante excampeón de peso pesado.

¿La conclusión? “Evita la violencia vial. Nunca sabes con quién podrías encontrarte”.