NUEVA YORK (CNNMoney) —- Los expertos buscan alternativas a las armas tradicionales para evitar incidentes como la muerte de un joven negro en Ferguson, Missouri, en 2014.
La Police Force Triple Defender es una nueva arma futurista diseñada específicamente para no matarte.
Esta nueva clase de arma de ciencia ficción te incapacita en tres formas: te puede cegar con gas pimienta, te puede dar una descarga con una pistola aturdidora y luego desorientarte con una luz estroboscópica.
Bienvenidos al mundo de las armas no letales… o menos letales, para usar la terminología policial, porque no hay garantías de que no te matarán.
Después de todo, un arma menos letal que los policías estadounidenses usan actualmente (la Taser) también es responsable de algunas muertes, aunque se discute la cantidad de víctimas.
Amnistía Internacional afirma que han muerto más de 500 personas en Estados Unidos “por haber recibido una descarga con una Taser durante su detención o en prisión”. Sin embargo, la empresa Taser afirma que la cantidad de muertos atribuidos directamente a la Taser es más o menos de 60.
Los Departamentos de Policía de todo Estados Unidos buscan armas que no maten. Eso se debe a que se han estudiado a detalle los incidentes en los que la violencia policial ha provocado la muerte de personas desarmadas.
Las inquietudes han crecido particularmente desde los acontecimientos violentos y los disturbios de 2014 en Ferguson, Missouri, causados por la muerte de un adolescente negro desarmado a manos de un policía blanco.
Ese mismo análisis provocó que el Departamento de Policía de Ferguson esté estudiando el uso de un dispositivo que disminuirá el impacto de una bala.
Con el nombre de Alternative (alternativa), el dispositivo es básicamente una pequeña pelota de metal que se sujeta a la punta del cañón de una pistola. Cuando se dispara el arma, la bala se incrusta en la bola y ayuda a reducir el impacto de la misma.
Es probable que el arma no cause la muerte de la persona, pero de todas formas sería muy doloroso.
“Vas a sentir como si Barry Bonds te diera un golpe en el pecho”, dijo Christian Ellis, fundador y director operativo de Alternative Ballistics, la empresa que fabrica el dispositivo. “Romperá algunas costillas”.
Otra empresa llamada Security Devices International ofrece una variedad de municiones menos letales que se pueden disparar con lanzagranadas de 40 mm. Esto incluye proyectiles que contienen gas pimienta o líquidos de colores para identificar a los sospechosos. También hay una “bala maloliente” que contiene “una carga muy desagradable que emite un olor horrible” que puede ayudar a dispersar a una multitud.
La Policía de Ferguson también empezó a usar cámaras portátiles. Las cámaras las fabrica Taser International. Sin embargo, las mismas Taser han estado bajo escrutinio.
Una Taser dispara electricidad a las personas y las aturde. En su sitio web, Taser señala que los pulsos eléctricos “afectan las funciones sensoriales y motrices del sistema nervioso periférico e incapacitan”. La empresa afirma que las armas no dañan los órganos vitales, que se “han disparado con seguridad más de tres millones y medio de veces” y que han salvado a 125.000 personas de la muerte o de salir heridas.
Sin embargo, Amnistía afirma que las Taser matan personas innecesariamente.
“Reconocemos que se necesitan herramientas menos letales para minimizar el riesgo de muerte y lesiones, lo cual es inherente al uso de armas de fuego por parte de la Policía”, dijo el investigador de Amnistía, Justin Mazzola. “Pero lo que siempre hemos pedido es que las Taser se consideren un último recurso. En este momento no hay pautas nacionales”.
El portavoz de Taser, Steve Tuttle, dijo que Amnistía Internacional hace que las Taser parezcan peores de lo que son al culparlas de cientos de muertes que en realidad tuvieron su origen en la intoxicación por drogas.
Incluso el Ejército estadounidense está estudiando usar un arma futurista para controlar multitudes. El arma, que desarrolló la empresa Raytheon, funciona básicamente como un horno microondas gigante.
Repele a las multitudes al emitir rayos de calor invisibles. Raytheon señala que su “Sistema de Negación Activa” es un arma que “emite un rayo concentrado de energía de ondas milimétricas que penetra hasta 0,4 milímetros en la piel y produce una sensación de calentamiento intolerable que provoca que los individuos contra los que se dirige huyan”.
Kelley Hughes, empleada civil que trabaja en el arma militar, se ofreció como voluntaria para recibir el impacto en cinco ocasiones. Lo comparó con el calor repentino que se siente al abrir la puerta de un horno aunque estaba a 100 metros de la fuente del rayo.
“Sentí un calentamiento insoportable”, dijo. “Sentí que el calor aumentaba rápidamente y duraba unos cuantos segundos en todo mi cuerpo. Mi reflejo inmediato fue alejarme rápidamente del rayo”.
La Fuerza Aérea estadounidense señaló que el Sistema de Negación Activa no es un horno de microondas aunque parezca. La Fuerza Aérea afirmó también que no es radiactivo, que no causa cáncer ni infertilidad y que solo puede ser letal si el rayo de energía “se emite de forma sostenida y prolongada en varias ocasiones”.
La Fuerza Aérea desplegó el arma en Afganistán en 2010. Pero fuera de las pruebas, no se ha usado contra humanos.
Aunque el uso de esa clase de armas en vez de pistolas podría ayudar a reducir la cantidad de muertes, no se han probado exhaustivamente para determinar las consecuencias a largo plazo. Además, en muchos casos, estas armas terminan por matar a sus blancos.
No hay sustituto para la buena vigilancia de la comunidad, de acuerdo con Sam Bieler, criminólogo e investigador del Centro de Políticas de Justicia del Instituto Urban.
“En realidad deberíamos estar pensando en qué entrenamiento podemos dar a nuestra Policía para que… dependan menos de la fuerza para que estos incidentes sean menos graves”, dijo.