El MESSENGER se estrellará sobre la superficie de Mercurio a finales de abril

Empecemos con un examen sorpresa (los aficionados al espacio pueden omitirlo). Verdadero o falso, Mercurio es lo siguiente:

1) El planeta más cercano al sol en nuestro sistema solar

2) Tan caliente que el agua no podría existir ahí

3) Algo que se utiliza en los antiguos termómetros de vidrio

4) Un planeta en el que no piensas muy a menudo

Respuestas: verdadero, falso, verdadero (pero no es de lo que estamos hablando en este artículo) y supongo que la número 4 también es verdadero.

Si reprobaste el examen, puede deberse a que Mercurio sufre de mala o muy poca prensa.

O, quizá solo es mala iluminación.

Mercurio orbita a más de 57 millones de kilómetros del sol. Si comparas eso con la Tierra, nos encontramos a más o menos 148,8 millones kilómetros del sol. La cercanía de Mercurio con el sol hace que sea difícil verlo excepto al amanecer y al anochecer. Esta podría ser una razón por la cual no pensamos mucho en Mercurio.

Venus, por otro lado, el planeta que se encuentra entre la Tierra y Mercurio, parece ser el planeta más brillante en el cielo. Es tan brillante que lo han confundido con un avión.

Pero volvamos a Mercurio.

Ahora está recibiendo cierta atención de los medios porque está a punto de recibir a un visitante.

La nave espacial de la NASA “MESSENGER” (un acrónimo en inglés para Superficie de Mercurio, Ambiente del Espacio, Geoquímica y Exploración) está a punto de estrellarse sobre Mercurio.

La sonda espacial fue lanzada en 2004 y viajó más de seis años y medio antes de que empezara a orbitar alrededor de Mercurio, el 18 de marzo de 2011. Ahora, MESSENGER se está quedando sin combustible y la NASA dice que chocará contra la superficie del planeta a 14.087 kilómetros por hora (3,91 km por segundo) aproximadamente el 30 de abril.

No podrás ver el impacto porque MESSENGER se estrellará del lado de Mercurio que está opuesto a la Tierra.

No hay manera de salvar la nave, pero los operadores de la misión en el Laboratorio de Física Aplicadas de la Universidad Johns Hopkins (APL, por sus iniciales en inglés) en Laurel, Maryland, han hecho lo posible para retrasar lo inevitable. Han estado usando lo poco que quedaba de combustible en la nave para mantenerla en órbita. Harán una última maniobra el viernes 24 de abril.

“Después de esta última maniobra, finalmente declararemos que la nave espacial ya no tiene propulsor, ya que esta maniobra reducirá casi todo nuestro remanente de gas helio”, dijo el ingeniero en sistemas de la misión, Daniel O’Shaughnessy, en una reciente reunión informativa con los medios. “En ese punto, la nave espacial ya no será capaz de luchar contra la atracción de la gravedad del sol”.

Pero en lugar de llorar la pérdida, los científicos hicieron una reunión informativa para celebrar el éxito de la misión.

“Por primera vez en la historia, ahora tenemos un conocimiento real sobre el planeta Mercurio que demuestra que es un mundo fascinante como parte de nuestro diverso sistema solar”, dijo John Grunsfeld, administrador adjunto de la Dirección de Misiones Científicas en las oficinas centrales de la NASA en Washington.

Este es uno de los grandes hallazgos de MESSENGER: envió de vuelta datos que indican que el hielo en las regiones polares ensombrecidas de Mercurio, si se extendieran sobre un área del tamaño de Washington, tendrían más de 3,2 kilómetros de grosor, dijo la NASA.

También tomó algunas fotos increíbles del planeta.

Así que la misión MESSENGER está llegando a su fin, pero los científicos dicen que estarán ocupados durante años estudiando los datos de la sonda.

Y si quieres ver a Mercurio con tus propios ojos, podrías tener suerte si encuentras un área con cielos oscuros. Será visible en el cielo nocturno justo antes del anochecer más o menos a finales de mayo.