(CNN) – Australia, un importante aliado de Estados Unidos, se ha comprometido a compartir parte de su inteligencia con Irán.
La Ministra de Asuntos Exteriores australiana, Julie Bishop, dijo que el acuerdo es “un arreglo informal”, el cual está enfocado en seguirles la pista a los australianos que se dirigen a Iraq para luchar por ISIS.
Pero al parecer un legislador australiano describió la medida como “jugar con fuego”.
El fin de semana, Bishop fue la primera ministra del gobierno de Australia en visitar Irán en un lapso de 12 años, al reunirse con el presidente Hassan Rouhani. El acuerdo para compartir inteligencia fue anunciado en una entrevista que Bishop le concedió a la Australian Broadcasting Corporation, mientras se encontraba en Teherán y que se dio a conocer el lunes.
“Durante mis conversaciones con el liderazgo nacional aquí, se acordó que podríamos compartir información de inteligencia, en particular sobre los combatientes terroristas extranjeros de Australia que están formando parte de este conflicto en Iraq”, dijo. Los iraníes “estaban muy dispuestos a compartir esa información con nosotros”, añadió.
Irán tiene acceso ‘a lugares a los que nosotros no tenemos’
Al igual que muchos países occidentales, Australia está lidiando con el problema de que sus ciudadanos están optando por viajar a Iraq y Siria para unirse a ISIS, el cual se autodenomina Estado Islámico.
Australia es parte de la coalición liderada por Estados Unidos que está llevando a cabo ataques aéreos contra ISIS.
Durante la lucha contra el grupo extremista suní, la coalición ha encontrado que sus intereses a veces están alineados con los de Irán, una nación de mayoría chiíta que tiene fuertes vínculos con el gobierno iraquí.
Las milicias chiítas, respaldadas por Irán, jugaron un papel importante en la reciente batalla para quitarle la ciudad iraquí de Tikrit a los yihadistas de ISIS.
“Irán tiene una relación desde hace mucho tiempo con Iraq, y como se señala, tiene una presencia militar muy fuerte allí. También tienen una influencia sobre la milicia chiíta que está operando dentro de Iraq, dijo. “Así que, están en Iraq, tienen acceso a lugares a los que nosotros no tenemos acceso. También tienen una red de inteligencia muy sofisticada y cuentan con una gran cantidad de información que han estado reuniendo”.
‘Realmente preocupados’
Bishop, quien salió de Teherán el domingo, se negó a dar detalles del acuerdo con Irán.
“Obviamente, si Irán tiene información que será de interés para nosotros, y si nosotros tenemos información que sería de interés para ellos, para perseguir nuestro objetivo común de derrotar a Daesh, entonces ese es un intercambio apropiado”, dijo, usando una alternativa para referirse a ISIS.
Sin embargo, Andrew Wilkie, un miembro australiano independiente del Parlamento, criticó el plan.
“El anuncio que hizo la Ministra de Relaciones Exteriores en relación a que Australia está llegando a un acuerdo de seguridad con el régimen de Teherán realmente debe preocupar a todos los australianos”, dijo, según la Australian Broadcasting Corporation.
“Cuando empiezas a jugar con fuego en un lugar como Teherán, corremos el riesgo de volvernos casi igual de malos que aquellos con los que nos relacionamos”, le dijo Wilkie a los periodistas.