La imagen fue mostrada por la fiscal, que busca la pena máxima para Tsarnaev.

(CNN) — Por años, la imagen que definía a Dzokhar Jahar Tsarnaev lo mostraba con sangre en una lancha estacionada en un patio de Watertown, Massachusetts, momentos antes de su captura.

Este martes, la fiscal federal Nadine Pellegrini mostró una nueva foto, una que, según la funcionaria, prueba qué tipo de persona es el ahora hombre de 21 años y el por qué debería de recibir la pena de muerte. La foto fue tomada en su celda unos tres meses después de los bombardeos en el Maratón de Boston y se puede ver a Tsarnaev mostrando su dedo mayor como muestra de desafío, no de remordimiento.

Jahar Tsarnaev no estaba ni está arrepentido o tampoco le importa porque no le generó compasión todo el sufrimiento y caos que creó”, aseguró Pellegrini en una corte de Boston. “Él estaba dispuesto a cruzar cada línea para llevarse la gloria y una recompensa”.

A menos de dos semanas de que Tsarnaev fuera condenado por 30 cargos vinculados a las explosiones en el Maratón de Boston de 2013 así como la persecución sangrienta que provocaron los hechos, el jurado inició la siguiente y última fase del juicio este martes, para resolver si el hombre obtiene una pena de muerte o una sentencia de cadena perpetua.

La fiscalía presentó primero sus argumentos, con Pellegrini argumentando que no solo está el hecho de que Tsarnaev tuvo un papel en las muertes de cuatro personas, así como heridas significativas para decenas más, sino la manera en cómo lo hizo —de tal modo que cada víctima sintiera dolor y terror, dándoles tiempo para sufrir pero no para decir adiós.

Para ayudar a pintar una imagen al jurado, la fiscal mostró un montaje de cuatro personas que Tsarnaev (y su hermano Tamerlan, quien fue abatido por policías) mataron a Lingzi Lu, Krystle Campbell, Martin Richard y Sean Collier.

“Todos ellos tenían vidas satisfactorias y promisorias: ahora estos bellos rostros son solo memorias”, dijo la fiscal. “Son símbolos de la pérdida”

La presentación de Pellegrini —incluyendo una foto de la celda de Tsarnaev de julio de 2013— fue proseguida por declaraciones de las víctimas que comenzaron con Celeste Corcoran, quien esperaba a su hermana en la línea de meta del maratón cuando las bombas explotaron en 12 segundos.

Corcoran dijo en la corte: “Yo, desafortunadamente, recuerdo cada pequeño detalle”, desde haber volado en el aire, hasta casi ahogarse por el humo negro de la explosión, escuchando gritos provocados por la horrible masacre a donde quiera que volteara.

“Recuerdo que veía para cualquier lado y observé sangre”, testificó Corcoran, a quien le amputaron partes de sus piernas tras el ataque. “Recuerdo haber pensado… no, esto tiene que parar, ¡no puede ser real!”.

Luego de que terminen los argumentos de la fiscalía, la defensa tendrá la oportunidad de presentar su caso para mantener a su cliente con vida. Los abogados de Tsarnaev llamaron a cuatro testigos durante el juicio más reciente, comparado con los 92 que solicitó la fiscalía, pero se desconoce la estrategia de la parte defensora para la fase final del juicio.

Incluso si el jurado termina apoyando la sentencia de muerte para Tsarnaev tras todo el proceso, su caso no estará cerrado. La mayoría de lo reclusos que están condenados a muerte, se mantienen así por al menos una década; actualmente, 19 de estos reclusos están esperando que se resuelvan apelaciones que presentaron.

Pellegrini, la fiscal federal, argumentó este martes que Tsarnaev merece solo la pena más severa posible.

Jahar Tsarnaev estaba determinado a convertirse en la peor pesadilla de Estados Unidos”, comentó Pellegrini sobre la forma de pensar del hombre antes, durante y después de la tragedia. “Su corazón estaba lleno de odio”.

Ann O’Neill reportó de Boston y Greg Botelho escribió esta historia desde Atlanta.