(CNNMoney) – Renunciar a un empleo no es algo que la mayoría de personas haga a la ligera. Los empleadores tienen que darles una muy buena razón… o varias.
Entonces, ¿qué es lo que finalmente lleva a alguien a salir por la puerta?
Los tres principales factores mencionados por trabajadores en Europa, Asia y Norteamérica son un aumento salarial mínimo, una falta de oportunidades de ascenso y una cantidad excesiva de horas extra.
Esa es la conclusión de una nueva encuesta realizada por EY en la que participaron 9.700 empleados a tiempo completo en ocho de las economías más grandes del mundo: Estados Unidos, Brasil, México, Reino Unido, Alemania, India, China y Japón.
Otros factores son las compañías o departamentos que no promueven el trabajo en equipo (71%); jefes que no les ofrecen a los empleados algo de flexibilidad en relación a cuándo y dónde trabajan, como por ejemplo trabajar a distancia (65%); y oficinas donde hay una sensación de que serás sancionado si optas por un horario de trabajo flexible (67%).
Puedes decir que se trata de un “estigma de flexibilidad”, lo que significa que tu compañía podría ofrecer políticas de trabajo flexibles en teoría, pero todos temen que utilizarlas en realidad será perjudicial para ellos. Por ejemplo, les preocupa que podrían ser sancionados al ser pasados por alto para un ascenso, no darles un aumento o peor.
Otro factor importante que los trabajadores dicen, los llevaría a decirle adiós a su jefe: demasiados viajes de negocios de una noche (62%).
Y más de la mitad también dijo que renunciaría a su empleo si hubiera un acceso muy limitado a mentores, y cuando hay muy pocos gerentes que conjugan ajetreadas vidas familiares: por ejemplo, quienes tienen hijos o quienes tienen hijos y un cónyuge que también trabaja.