El Pentágono busca desarrollar la tecnología para rastrear el flujo de información dentro de la red profunda (CNN).

WASHINGTON (CNN) – Luego de meses de bombardeos de Estados Unidos y las fuerzas de la coalición, el ISIS permanece sin ser derrotado sobre el terreno y ahora ha iniciado una nueva fase, utilizando el mundo cibernético como un arma.

Como evidencia de dicha evolución, uno no necesitaría ver más que el reciente ataque en Garland, Texas, inspirado en ISIS, que fue realizado por un atacante, Elton Simpson, luego de que públicamente tuiteara utilizando la etiqueta #TexasAttack.

Es una tendencia que ha capturado la atención de las agencias de seguridad y ahora del Ejército.

“Lo que siempre busco es saber en qué punto los grupos, por ejemplo, deciden que necesitan cambiar de ver al internet como una fuente de reclutamiento, como una fuente de divulgación de ideología, como una fuente para divulgar su mensaje, su propaganda, hacia algo de mayor preocupación: verlo como un arma potencial”, dice el almirante Michael Rogers, director de la Agencia de Seguridad Nacional y jefe de guerra cibernética del Pentágono.

Esto está forzando al Pentágono a confrontar al ISIS dentro de un internet secreto que muchos de nosotros nunca hemos visto. Se llama la red profunda. Estados Unidos cree que ISIS y otros potenciales terroristas están utilizando la parte más anónima de internet para reclutar a combatientes, compartir inteligencia y planear ataques en el mundo real.

Piensa en el internet como un Iceberg

“Todo sobre el agua es lo que llamamos la internet de la superficie la cual puede ser indexada a través de Google o a través de otro motor de búsqueda. Pero debajo del agua hay un gran iceberg 80% más grande que lo que está sobre la superficie, esa es la red profunda, esa es la parte de la red que no está indexada”, dice Lillian Ablon de Rand Corporation. “Hay tanto en la red profunda que simplemente no podemos buscar en Google. Para nosotros está oscura, para Google también está oscura”.

Aunque es un espacio difícil de iluminar, ahora el Pentágono está desarrollando una forma para mantener las puertas abiertas y cazar a ISIS y a otros.

“Necesitamos una tecnología para descubrir dónde está el contenido y hacerlo disponible para ser analizado”, dice Chris White de los Proyectos de Investigación Avanzada para la Defensa, o DARPA (por sus siglas en inglés).

DARPA tiene una nueva tecnología conocida como MEMEX que actúa como un motor de búsqueda único, rastreando patrones de actividad en la red profunda y sitios no disponibles a través de los ruteadores tradicionales como Google o Bing.

“MEMEX te permite saber cuántos sitios de internet hay y qué tipo de contenido se encuentra en ellos”, dice White. “Fue de hecho desarrollado primeramente para rastrear el tráfico ilegal de personas en la red y es una idea que sirve para los usuarios que intentan ocultar sus actividades ilícitas”.

Todo comienza, según White, con el poder rastrear los lugares donde está ocurriendo dicha actividad.

Un verdadero desafío

Sin embargo, ocultarse en la red profunda se ha convertido en algo muy sencillo gracias a TOR, un navegador que se conecta a dicha red enmascarando los puntos de acceso mientras los disemina por todo el mundo.

Esto impide que cualquier persona, o inclusive una agencia de inteligencia o policial sepa qué sitios visitas y dónde exactamente estás localizado.

Eso básicamente te hace invisible, y es por el mismo motivo que al Ejército de Estados Unidos y a la comunidad de inteligencia no les queda de otra que mantenerse en una persecución de alto riesgo en un intento por encontrar a ISIS antes de que ataque de nuevo.