El príncipe Carlos expresó fuertes puntos de vista en algunos temas en sus cartas a Tony Blair (Matt Dunham - WPA Pool/Getty Images).

(CNN)— Tal parece que el príncipe Carlos tenía un indicio, quizás un ligero sentimiento, de que las cosas iban a resultar como él quería.

Cartas privadas que escribió el príncipe al entonces primer ministro Tony Blair en 2004 y 2005, expresando su punto de vista en varios temas, fueron difundidas a la opinión pública debido a la ley británica respecto a lo que debe hacerse público, en respuesta a una solicitud.

“Querido primer ministro”, escribió el integrante de la realeza británica en febrero de 2005. “Fue muy bueno verlo el otro día, y como es usual, disfruté la oportunidad de hablar con usted sobre varios temas. Usted sugirió amablemente que sería de mucha ayuda si pusiera mis impresiones en un escrito, ¡a pesar del Derecho de Libertad de Información!

Unas 27 cartas escritas por el príncipe a siete departamentos del gobierno entre septiembre de 2004 y abril de 2005 fueron difundidas esta semana, en respuesta a una solicitud del periódico The Guardian bajo el Derecho de Libertad de Información.

Las cartas dirigidas a Blair parecen ser poco importantes, aunque algo vergonzosas. Las misivas abren con un saludo, “Querido primer ministro” y cierran con una frase, “A sus órdenes, siempre”, seguido de garabatos indescifrables que la razón indica que dicen “Carlos”.

Políticas específicas fueron discutidas

En las cartas, se discuten varias áreas de políticas específicas, lo que resulta algo peligroso ya que se supone que la familia real debe estar por encima de la refriega política.

Tal como lo indica el sitio electrónico del Parlamento, Gran Bretaña es una monarquía constitucional en la que el monarca “se mantiene imparcial en materia de política”.

Sin embargo, el príncipe expresa fuertes puntos de vista en algunos temas.

En una carta escrita a Blair el 8 de septiembre de 2004, Carlos informó que los criadores de ganado vacuno necesitaban ayuda si se les retiraban los subsidios.

“La preocupación es que el retirar apoyo específico a estas personas significaría que los criadores de vacuno decidirán que simplemente no será viable el seguir cuidando a sus animales”, dice la carta. “Si esto ocurre, las grandes áreas de la zona rural que dependen de la carne cambiarán y se volverán irreconocibles”.

Más adelante, el príncipe escribe que “cualquier ayuda debe ser otorgada a los criadores de ganado vacuno”.

Cabe señalar que el príncipe Carlos es dueño de la granja Duchy Home, donde se crían vacas y becerros. The Guardian en una ocasión se refirió al integrante de la realeza como el “granjero formalmente conocido como un príncipe”.

Pero no está claro si la granja del príncipe se benefició de cualquier cosa que propuso. Y también hay que destacar que Carlos recauda mucho dinero para caridad, principalmente de sus ganancias en la granja.

Tampoco está claro si el primer ministro estuvo de acuerdo con lo expresado con la carta del príncipe. Tony Blair le contestó en más de un mes sobre el apoyo a los criadores de ganado vacuno.

Pero la respuesta del exprimer ministro es cordial. Y cierra con una nota alabando un discurso de Carlos sobre el cambio climático antes de que termine, “A sus órdenes siempre, Tony”.

¿Alguna manera de evadir las reglas de la Unión Europea?

La carta del príncipe Carlos incluye otro punto potencial de vergüenza. El príncipe parece sugerirle al gobierno de Blair que busque una manera de evadir las reglas de la Unión Europea.

El monarca expresa el deseo de que se pueda hacer más para alentar a las personas a comprar carne británica. Solo con el apoyo de los consumidores, escribe, es que sobrevivirá la agricultura británica.

“Sé que las reglas europeas prohíben al gobierno llevar a cabo una campaña para promover solamente lo que producen los británicos, pero a pesar de todo eso, sería espléndido si el gobierno pudiera encontrar maneras innovadoras de poder dar ese paso”, escribe.

Pero parece ser que las cartas tienen poco contenido que pudiera amenazar a la monarquía o el papel del príncipe como heredero del trono.

Para acceder al trono, sin embargo, deberá esperar su turno, como lo ha hecho por más de 60 años. Su madre, la reina Elizabeth II, no muestra ningún indicio de retirarse. Y este otoño, con más de 63 años en el trono, pasará a la reina Victoria para convertirse en la monarca con el reinado más largo en la historia de la realeza británica.

Lo que haría al príncipe Carlos uno de los herederos más longevos en la historia.

Richard Allen Greene de CNN contribuyó a este reporte.