(CNN) – Al ver por toda la ciudad y sobre los rascacielos frente a ti hay vacas. Sí, leíste bien. Los animales de granja pastan con satisfacción en lechos de granjas urbanas elevadas, las cuales llenan el horizonte de Londres.
En otro lugar, lejos de la tierra firme en Inglaterra, contra el telón de fondo de los deslumbrantes acantilados de Dover, una intrincada estructura de contenedores forma parte de una ciudad flotante.
Así es como viviremos de aquí a cien años… si se le puede creer a un panel de expertos del Reino Unido.
Ciudades del futuro
Contenedores apilables para viviendas temporales, ciudades submarinas y casas hechas con impresoras 3D “listas para llevar” también ayudarán a aliviar la carga de sobrepoblación y la escasez de espacio habitable dentro de las ciudades.
Edificios con su propio microclima y ciudades construidas en lo alto también se encuentran entre las asombrosas proezas de la ingeniería del futuro que el panel ha pronosticado, el cual incluye a Rhys Morgan, director de ingeniería y educación en la Real Academia de Ingeniería en Londres, los arquitectos galardonados Arthur Mamou-Mani y Toby Burgess, y la urbanista Linda Aitken.
Pero no solo los arquitectos del mañana continuarán avanzando hacia las nubes mientras construyen cada vez más alto, conforme los avances de la ingeniería lo permitan, sino que también se dirigirán a lo más profundo debajo del suelo. El panel sugirió que las ciudades futuras presentarán increíbles estructuras de sótanos de muchos niveles –las que ya han empezado a tener gran impacto en áreas de gran densidad como Londres— que ayudarán a aliviar la falta de espacio urbano sobre la tierra.
Y aunque sus predicciones pueden parecer un poco extravagantes, el esplendor de la ingeniería frecuentemente surge al pensar en cosas originales, tal y como lo explicó uno de los panelistas.
“Son pocos los momentos ‘de inspiración’”, dijo Morgan. “Como tales, las hazañas de la ingeniería que actualmente son inalcanzables, requieren tiempo para que las piezas encajen unas con otras y las mentes responsables del desarrollo de las ideas pasen a través de todas las vías muertas antes de alcanzar lo que actualmente es imposible”.
“Los grandes avances en la ingeniería funcionan del mismo modo que los grandes avances en la literatura, la música y la forma de vivir… se requiere de una acumulación de diferentes descubrimientos (o influencias) para crear el catalizador final para un nuevo descubrimiento”.
Las 10 principales predicciones de la ingeniería
1. Sótanos súper profundos.
2. Ciudades marinas flotantes.
3. Granjas a gran altura o sobre los tejados.
4. Casas hechas con impresoras 3D.
5. Edificios con sus propios microclimas.
6. Grandes puentes que abarcan ciudades enteras.
7. Puertos espaciales con fácil acceso a la Luna o a Marte.
8. Edificios súper altos… ciudades en el cielo.
9. Ciudades submarinas.
10. Viviendas en contenedores apilables o plegables.
Mientras tanto, según el panel, los viajes del futuro mostrarán colosales puentes que abarcarán ciudades. ¿Quieres tomar una copa en Marte rápidamente? No hay problema… los expertos predicen que los puertos espaciales serán lugares comunes, de modo que las futuras generaciones podrán dirigirse hacia su estación local e irse en el próximo viaje.
Las predicciones –fuertemente centradas en la arquitectura a base de agua y la reflexión sobre temas contemporáneos tales como la sobrepoblación, el calentamiento global y el aumento del nivel del mar– se recopilaron para marcar el lanzamiento de Impossible Engineering (Ingeniería imposible), un nuevo programa de televisión en el canal Yesterday del Reino Unido.
A través del uso de las descabelladas predicciones tecnológicas futuras, 2.000 personas fueron encuestadas para descubrir cuál de las sugerencias pensaban –y esperaban– que se convertiría en una realidad para el año 2115.
Lo que encabezó la encuesta fueron los complejos súper profundos con hoteles, restaurantes, jardines y espacios verdes sumergidos, piscinas y gimnasios.
La encuesta también encontró que uno de cada tres encuestados considera las ciudades marinas flotantes –que podrían utilizar la energía solar y mareomotriz– como una opción viable para el desarrollo futuro.