WASHINGTON (CNN) – El gobernador de Luisiana, Bobby Jindal, quien una vez fue una estrella republicana en ascenso y dejó pasar una oportunidad para contender por la Casa Blanca en 2012, anunció el miércoles su candidatura bajo circunstancias mucho más difíciles.
Jindal anunció su candidatura a través de las redes sociales, solo unas horas antes de que celebrar su primera concentración.
“Me estoy postulando a la presidencia de los Estados Unidos de América. Acompáñenme”, tuiteó Jindal, con un enlace a la página del anuncio en su sitio web.
Si él quiere competir en el expansivo campo republicano, tendrá que resucitar una reputación que ha caído significativamente en años recientes. Según las encuestas, Jindal se ubica en las últimas posiciones del campo; su resultado fue de solo el 1% en la más reciente encuesta de CNN/ORC.
La popularidad de Jindal en su propio estado se ha visto afectada —una encuesta reciente registra sus índices de aprobación en el 32%— gracias a los problemas presupuestarios y quizás a una preocupación respecto a dirigirse a una audiencia nacional. Su negativa a aumentar los impuestos para ayudar a equilibrar los libros del estado ha dado lugar a profundos recortes a programas populares y a áreas de gasto gubernamental como el cuidado de la salud y la educación.
Su esposa lo presentará en el escenario esta noche; no habrá otro orador antes de que él tome el podio. Habrá un par de videos, y esperan alrededor de 500 personas en el centro de convenciones en Kenner, Luisiana para el evento.
Jindal, el primer gobernador indio-americano, probablemente sea mejor conocido a nivel nacional por su cambio repentino sobre los estándares educativos esenciales: de apoyo a oposición, una medida que muchos vieron como oportunista a medida que avanza hacia una candidatura presidencial.
En 2010, su estado implementó los estándares. Para 2014, él los estaba rechazando. En el ínterin, muchos conservadores temerosos de que el gobierno se apoderara de las escuelas habían empezado a protestar en contra de los estándares en todo el país, impulsando a los políticos republicanos a reconsiderar su apoyo.
El cambio de Jindal constituyó un momento decisivo para el político, quien luego de que Romney perdiera en 2012, trabajó para que el Partido Republicano representara algo más que solo ser el “partido del no”.
El graduado de la Universidad de Brown y erudito de Rhodes llegó incluso más lejos, al castigar a sus semejantes por metidas de pata verbales y errores no forzados cuando politiqueaban en las etapas previas a las elecciones presidenciales.
“No va a ser la última vez que alguien diga algo estúpido dentro de nuestro partido, pero no puede ser tolerado dentro de nuestro partido”, dijo. “También hemos tenido suficiente de este conservadurismo simplificado. Tenemos que dejar de ser simplistas; tenemos que confiar en la inteligencia del pueblo estadounidense y tenemos que dejar de insultar la inteligencia de los votantes”.
Pero el cambio que dio en relación con los estándares esenciales marcó a Jindal como un hombre dispuesto a dirigirse a su base… algo parecido a aquellos políticos que había condenado en 2012.
Estados Unidos también recuerda al político de 44 años de edad por su respuesta republicana al primer discurso en conjunto de Obama al Congreso en 2009; una ocasión que es más recordada por la curiosa entrega de Jindal que por cualquier otra cosa.
Aunque las encuestas iniciales demuestran que Jindal tiene pocas probabilidades, él ha formado un nicho de vibrante apoyo entre los cristianos evangélicos y los activistas que se oponen a los estándares esenciales.
Él también se ha posicionado como uno de los principales oponentes a la “corrección política”, y en ocasiones ha dirigido el control de su partido en los ataques en contra del Islam radical, mientras también se involucra en el territorio controvertido.
El miércoles, en la sesión informativa de una hora con los reporteros en Nueva Orleans, quienes pronto serán los asesores de la campaña presidencial de Jindal enfatizaron que el gobernador de Luisiana recalcará su historial como ejecutivo mientras se enfoca en una estrategia de los primeros estados.
“Vamos a cazar donde están los patos”, dijo el principal estratega Curt Anderson, quien es asesor de Jindal desde 2003 y exdirector político de RNC.
En su discurso del miércoles, se espera que Jindal reitere sus puntos de vista respecto a que los inmigrantes deben adaptarse de mejor forma a Estados Unidos y que ya no quiere seguir hablando de estadounidenses originarios de países extranjeros.
Sus cuatro principales objetivos como presidente serían asegurar la frontera, reemplazar Obamacare, desarrollar el sector privado y mejorar la defensa, dijeron. Él será “agresivo” en hacer un llamado a la destrucción del Islam radical, y respecto a que la contención es una estrategia para los perdedores.
El gobernador de Luisiana probablemente luchará por tener un espacio a la derecha del campo republicano hasta ahora conformado por 13 personas, junto al senador de Texas, Ted Cruz, al exgobernador de Arkansas, Mike Huckabee, al neurocirujano Ben Carson y al exsenador de Pensilvania, Rick Santorum.
Los asesores argumentan que Jindal no ha sido muy buscado como los otros candidatos, así que naturalmente el reconocimiento de su nombre será bajo.
“La mitad de estas personas no saben quién es su propio gobernador, no digamos el gobernador de Luisiana”, dijo Anderson, en referencia a los votantes en todo el país que no tienen tanto conocimiento sobre la política presidencial, como es el caso de los reporteros y operativos.
Si sus cifras siguen siendo bajas en cuestión de tres meses, dijeron, entonces lo considerarían problemático.
Y ¿se involucrarán en los debates antes de agosto? “No lo sabemos”, dijo Anderson, y argumentó que Jindal es “tremendo” para los debates.
Timmy Teepell, quien será el gerente de la campaña, dijo que el Partido Republicano debería querer que Jindal esté en el escenario debido a su juventud y a su historial. “No me puedo imaginar por qué el partido no habría de quererlo, especialmente cuando consideras a los otros candidatos que podrían estar en el escenario”.
Jindal fue un niño prodigio en la política, cuando saltó a la escena inicialmente para ayudar a darle forma a la política del cuidado de la salud. En 1996, a la edad de solo 24 años, Jindal fue nombrado como el director del departamento de políticas de salud de Luisiana.
Más adelante, trabajó bajo el presidente George W. Bush en el Departamento de Salud y Servicios Humanos como uno de los principales asesores para Tommy Thompson, quien en ese entonces era el secretario de salud y servicios humanos.
Jindal creció en un hogar hindú, y se convirtió al catolicismo en la escuela secundaria.
Tuvo su primera experiencia en la política en 2003, cuando sorprendió a muchos por obligar a una segunda vuelta en la contienda por la gobernación de Luisiana. Aunque perdió, participó en una exitosa contienda por un escaño en el Congreso en 2004, donde fungió hasta que finalmente ganó la mansión del gobernador en 2008.
La primera parada de Jindal luego de su discurso del miércoles por la noche será New Hampshire el jueves, seguido por Iowa el viernes. El llevará a cabo un evento de recaudación de fondos en Baton Rouge el sábado; este será el único evento de recaudación de fondos que aparecerá en sus informes financieros para el período que termina el 30 de junio, dicen.