(CNN)– Una evaluación preliminar de las agencias de inteligencia estadounidenses proporcionada tras el desastre del MH370 sugiere que es probable que alguien en la cabina deliberadamente causara que los movimientos de la aeronave se desviaran antes de que el avión malayo desapareciera.
Dos funcionarios estadounidenses con conocimiento del asunto, dijeron que la evaluación –que no se hizo con la intención de que fuera publicada– fue preparada hace meses y se realizó únicamente con base en la evidencia disponible del satélite y de otro tipo, y no con base en los hallazgos más detallados de los investigadores. Otro funcionario del gobierno dijo que la evaluación es el panorama más actual de los funcionarios de Estados Unidos con base en lo que hasta ahora se conoce sobre el destino del avión.
La evaluación de inteligencia se queda corta en cuanto al establecimiento de conclusiones firmes de lo que le sucedió al MH370. Pero podría renovar el enfoque sobre los dos pilotos, o quizás alguien más, en la cabina de la aeronave. CNN informó a principios de este año que la inteligencia estadounidense se inclinaba a creer que existían actos deliberados detrás del errático vuelo del avión, pero no es que estos hayan llegado a una conclusión.
El FBI y la Junta Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés) prestaron asistencia a los investigadores malayos que lideran la investigación acerca de la desaparición del avión de pasajeros. La tripulación del avión ha sido el enfoque de atención desde la misteriosa desaparición, pero no ha surgido ninguna prueba que indique que tenían la intención de destruir el avión. La autoridad competente y las agencias de inteligencia de una serie de países examinaron la lista de embarque de la tripulación y de los pasajeros, y no encontraron información significativa alguna que sugiera que cualquier persona a bordo presentara una amenaza evidente.
Los portavoces del FBI y el Director de Inteligencia Nacional no quisieron hacer comentarios.
Se espera que los investigadores franceses examinen la pieza de los restos de la aeronave que se encontró en días recientes cerca de la isla francesa de la Reunión, en el océano Índico, para determinar si pertenece al MH370. Si es así, se espera que los investigadores examinen la parte del avión en busca de cualquier cosa que apunte a una explosión o falla catastrófica. Sin embargo, es probable que el hecho de establecer una causa para el desastre tenga que esperar a que se encuentren más restos y, más específicamente, los registradores de datos que se cree que están en alguna parte, bajo el agua.
A principios de este año, un informe de los investigadores malayos indicó que no se había encontrado indicación alguna de una conducta inusual entre los pilotos y la tripulación de cabina del Vuelo 370 antes de que despegara y se desvaneciera en la madrugada del 8 de marzo del 2014.
“No hubo señales conductuales de aislamiento social, cambio en los hábitos o intereses, autonegligencia, abuso de drogas o alcohol de parte de capitán, el primer oficial y la tripulación de cabina”, decía el informe.
La evaluación de la inteligencia estadounidense se enfocó en gran medida en los múltiples cambios de curso que la aeronave hizo después de que se desvió de su ruta programada desde Kuala Lumpur hacia Beijing. Los analistas determinaron que, en ausencia de cualquier otra prueba, es muy probable que alguien en la cabina deliberadamente moviera la aeronave hacia algunas coordenadas específicas, cruzando el territorio indonesio y, finalmente, hacia el sur del océano Índico.
El informe malayo decía que la aeronave fue vista en el radar tailandés e indonesio, así como también el satélite regional de Inmarsat, durante horas después de que se desviara de su curso. “El análisis mostraba que la aeronave cambió de rumbo poco después de que pasó el extremo norte de Sumatra (Indonesia) y viajó en dirección sur hasta que se quedó sin combustible al sur del océano Índico, al occidente de Australia” según el informe.
El informe de la investigación de Malasia decía que el capitán del MH370, Zaharie Ahmad Shah, no tenía ningún problema personal o financiero que pudiera arrojar alguna sospecha sobre él.
“La capacidad del capitán para manejar el estrés en el trabajo y en su casa era buena. No existe ningún historial conocido de apatía, ansiedad o irritabilidad” decía el informe. “No había sufrido ningún cambio significativo en su estilo de vida, conflictos interpersonales o tensiones familiares”.
Los investigadores examinaron los antecedentes de los diferentes miembros de la tripulación. También examinaron secuencias de la tripulación del vuelo en televisión de circuito cerrado en los aeropuertos –al menos en tres vuelos anteriores– y no vieron señal alguna de cambio de conducta.
Ahmad Jauhari Yahya, director ejecutivo de Malaysia Airlines, ha defendido con vehemencia a sus empleados. “No sospechamos de ninguna persona en nuestra tripulación hasta que veamos evidencias”, dijo.
Los investigadores malayos también dijeron que no podían descartar ninguna otra causa posible de la desaparición del vuelo.