La policía italiana capturó a 11 personas con vínculos con la mafia  que permitieron que Messina Denaro transmitiera sus órdenes y permaneciera en el cargo.

(CNN) – Al hacer uso de mensajes codificados y encuentros en lugares rurales aislados, una red de partidarios ha ayudado al presunto jefe de la Mafia, Matteo Messina Denaro –prófugo desde hace años–, a manejar su imperio criminal.

Pero las autoridades italianas dicen que, al arrestar en Sicilia a 11 personas acusadas de ser miembros de la Mafia, le han dado un golpe a la red secreta.

Entre ellos se encuentran los que no tienen antecedentes penales y muy pocos indicios que sugieran que tienen una conexión con el crimen organizado, incluyendo a un pastor, dueño de una granja de productos lácteos, un conductor de camión y un inspector.

De acuerdo con la policía de Palermo y el departamento anti-mafia, estos sospechosos eran parte de una estructura de “hombres de honor” que permitieron que Messina Denaro transmitiera sus órdenes y permaneciera en el cargo.

Ellos se reunían clandestinamente en lugares remotos del campo para entregar las cartas del jefe –o “pizzini”–, usando un lenguaje cuidadosamente codificado cuando hablaban para evitar ser detectados, decía un comunicado de prensa de la policía.

¿Alguna vez perderá la mafia el control en Italia?

Cuentas bancarias examinadas

Las pizzini eran entregadas únicamente cada tres meses, en un intento de escapar de la atención de los investigadores y evitar que estos le dieran seguimiento al origen de las notas, dijo la policía.

Pero a pesar de tales precauciones, la red parece estar aproximándose en torno a Messina Denaro.

Otras 18 personas fueron detenidas como parte de la misma operación policial.

Otras investigaciones financieras se están llevando a cabo en los bancos suizos con respecto a las cuentas bancarias que, los investigadores sospechan, se han utilizado para financiar la carrera del jefe.

Un policía italiano camina con uno de los sospechosos en Palermo.

La versión de la policía respecto a las notas que pasaron entre Messina Denaro y su supuesta red pueden hacer que a los observadores de la Mafia les resulte familiar.

En el 2006, los investigadores se abalanzaron sobre el entonces jefe de la Mafia, Bernardo Provenzano –prófugo desde 1963–, capturándolo sin lucha alguna, el pueblo de Corleone, cerca de su ciudad natal de Sicilia, hecho que fue lanzado a la fama por el autor Mario Puzo en “El Padrino”.

Provenzano, quien entonces tenía 73 años de edad, fue acusado por las autoridades de haberse encargado de la Cosa Nostra con mano de hierro desde que asumió el cargo. ¿Su modus operandi? Las órdenes pasaron ​​a los subordinados a través de notas de papel precisas, bien dobladas.

El papa le dice ‘no’ al complot con la Mafia

Los últimos movimientos en contra de los sospechosos de tener conexiones con la Mafia, vienen en medio de una aparente determinación de acabar con el crimen organizado en Italia.

En marzo, el presidente italiano Sergio Mattarella le contó a Christiane Amanpour, de CNN, cómo su propio hermano había sido asesinado a manos de la Mafia hace más de tres décadas.

“En todos estos años siempre he tratado de enfatizar y promover la necesidad de luchar contra la Mafia”, dijo. “Porque es un cáncer opresivo, el cual sofoca la libertad de todos y reduce la posibilidad de que las zonas en las que está presente prosperen y se desarrollen”.

Cuando habló en Turín en junio, el papa Francisco también instó a su audiencia a que lucharan contra el crimen organizado y la corrupción.

“Nosotros le decimos ‘no’ a la corrupción, la cual está tan generalizada que pareciera ser una actitud, un comportamiento normal”, dijo. “Pero no en palabras, sino con los hechos. Nosotros le decimos ‘no’ a la conspiración, al fraude, los sobornos y a todo lo parecido que viene de la Mafia”.