Lord Sebastian Coe se convirtió en el sexto presidente de la IAAF (Lintao Zhang/Getty Images for IAAF).

(CNN)– El exatleta británico Sebastian Coe fue nombrado nuevo presidente del organismo rector del atletismo mundial, la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF).

Coe, que ganó cuatro medallas olímpicas, incluyendo dos medallas de oro, como corredor de media distancia, lideró la exitosa candidatura de Londres como sede de los Juegos Olímpicos de 2012.

Un exlegislador lo nombró miembro vitalicio -conocido como Lord - en la Cámara alta del Parlamento de Gran Bretaña en el año 2000.

La IAAF confirmó que Coe, quien previamente era vicepresidente del organismo, se convirtió en su sexto presidente en el 50 Congreso en Beijing este miércoles, superando a exsaltador de pértiga ucraniano Sergey Bubka en la votación final.

“Me siento profundamente honrado de que nuestro deporte ha depositado su confianza en mí. No hay trabajo que quiera hacer más, ni con mayor compromiso”, dijo Coe, citado en el sitio web de la IAAF.

El nombramiento de Coe llega en un momento turbulento para el atletismo, en medio de acusaciones de dopaje.

Controversia por dopaje

A principios de este mes, el diario británico Sunday Times y la cadena alemana ARD revelaron que tuvieron acceso a una base de datos filtrada que contenía más de 12.000 pruebas de sangre de 5.000 atletas desde 2001 a 2012. Destacados expertos llegaron a la conclusión de que estos que estos revelaron un “extraordinario nivel de fraude” en el deporte.

Sin embargo, la IAAF negó que el atletismo esté sufriendo una crisis similar a la cultura de dopaje en el ciclismo profesional. El deporte fue acosado por el consumo de drogas y encubrimientos de alto nivel entre los años 1990 y 2000.

“Si la transparencia es un problema, daremos a bienvenida a cualquier investigación del único órgano autorizado para investigar - la Agencia Mundial Antidopaje (AMA),” dijo el responsable de antidopaje de la IAAF, Thomas Capdevielle, a CNN.

Mientras tanto, Coe calificó los informes como “sensacionalismo” y un intento de “destruir la reputación de los atletas y nuestro deporte”. Le dijo a la Associated Press que se trataba de una “declaración de guerra”.

Pero los expertos en dopaje australianos Michael Ashenden y Robin Parisotto, que analizaron las pruebas filtradas, concluyeron que las pruebas de resistencia desde los 800 metros hasta el maratón habían producido resultados “sospechosos”.

En las grandes competiciones, esto equivalía a cerca de 150 medallistas, incluyendo 55 campeones.