Colombianos deportados esperan para cruzar la frontera en La Fría, Táchira, el 29 de agosto

(CNN Español) – Tras las quejas del gobierno colombiano, las autoridades de Venezuela habilitaron un corredor humanitario para que decenas de estudiantes regresaran a clases en Cúcuta.

Se trata de estudiantes de primaria, secundaria y universitarios hijos de padres colombianos o matrimonios mixtos. En total el gobierno colombiano calcula son 2.000 niños y jóvenes que viven en Venezuela y estudian en Colombia.

Aparte del regreso a clases de los estudiantes, el presidente colombiano exigió otras dos condiciones para estar dispuesto a reunirse con Nicolás Maduro y solucionar esta crisis: Santos pidió que se permita a los deportados recuperar sus pertenencias y que Venezuela cumpla sin maltrato con los protocolos de deportación.

El gobierno venezolano cerró la frontera en el estado Táchira y decreto un estado de excepción en distintas localidades limítrofes para detener el contrabando y el avance de lo que califico de paramilitares que atacaron una patrulla fronteriza.

Desde hace 15 días cuando comenzó la crisis en la frontera ente Colombia y Venezuela la cifra de colombianos que han regresado de Venezuela a su país llega a las 16.529 personas.

Así lo estableció la ONU después de sumar los 15.174 colombianos que han vuelto de forma voluntaria, más los 1.097 deportados por el gobierno de Nicolás Maduro.

La mayoría de los deportados se encuentra en la ciudad colombiana de Cúcuta.

Almagro visita la frontera

Ya llegaron a Colombia los cancilleres de Argentina y Brasil para reunirse con su par colombiana María Ángela Holguín.

Buscan enterarse de la situación y propiciar un dialogo directo entre ambos presidentes.

También llegará a Colombia el secretario general de la OEA.

Luis Almagro viajará a Cúcuta para conocer de primera mano los pormenores de la crisis humanitaria que se ha creado en el lado colombiano de la frontera.

Almagro asumió como suyo el comunicado de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que urgía el fin de las expulsión colectiva, arbitraria o sumaria de colombianos y abstenerse de adoptar cualquier medida que destruya sus propiedades.