(CNN Español) – El peruano Gerald Oropeza López, investigado por la Fiscalía de su país por presuntamente ser la cabeza de una organización que exportaba drogas a Europa y México, fue capturado este sábado en Ecuador y devuelto el domingo a su país.
El lunes fue trasladado al penal de máxima seguridad Ancon 1 en la capital peruana, donde esperará los dos juicios que se le han abierto, uno por narcotráfico y otro por lavado de activos, con penas no menores a los 25 años de prisión.
Captura en Ecuador
Cuando se vio acorralado por la Policía, Gerald Oropeza, el sospechoso de narcotráfico más buscado por la justicia peruana, intentó esconderse en un local comercial del balneario de Salinas en Ecuador.
En conferencia de prensa en Lima, el Director de Investigación Criminal de la Policía, Jose Luis Lavalle dijo que “Gerald Oropeza caminaba por el malecón de dicho balneario y al advertir su inminente captura quiso refugiarse en una farmacia. Allí fue reducido e identificado plenamente”
Sospechoso ataque a camioneta de lujo
La prensa y justicia peruana sospecharon por primera vez de Oropeza cuando en abril de este año el auto de lujo en el que regresaba del aeropuerto después de un viaje a Mexico fue atacado con granadas y ametralladoras.
Oropeza logro huir pero dos de sus amigos resultaron heridos. La Policía incautó allí su teléfono celular en el que dicen haber encontrado conversaciones sobre presuntos despachos de droga a Europa.
Según su abogado, Marco Riveros, el atentado fue producto de una extorsión. Para la Fiscalía peruana fue un ajuste de cuentas entre bandas de narcotraficantes.
¿Narcotraficante, o heredero millonario?
Riveros dice que Oropeza es el hijo de un empresario multimillonario.
“Este ciudadano ha sido copropietario de una empresa en este país que se denomina Sergerosac que ha tenido más de 400 millones de soles en licitaciones, estamos hablando de mas de 150 millones de dólares”
Sergerosac es una empresa de limpieza industrial que trabaja principalmente para el Estado.
Las pruebas que lo incriminan
Pero la fiscalía no sólo lo investiga por su nivel de gastos , también por las supuestas conversaciones sobre envíos de drogas que estarían grabadas en su teléfono.
Al respecto Riveros sostiene que “son audios (…) que han sido insertados por una persona que a la fecha no explica como las ha obtenido.”
Otro tema que deberá investigarse es la muerte violenta de dos hombres vinculados a Oropeza, pocos días después del ataque a su camioneta.