(HLN) – Facebook tiene mucho dinero. Ellos poseen muchas cosas… muchísimas cosas. Ellos podrían poseer muchas más.
Pero ¿una cosa que ellos no pueden poseer incluso con sus bóvedas llenas de Zuckerdólares? Tus fotos, perfiles y actualizaciones de estado… sin importar lo que pueda asegurar esa falsa y santurrona publicación de derechos de autor que continúa apareciendo en el sitio social.
Es probable que la hayas visto puesto que saltó nuevamente esta semana, y puede ser que incluso la hayas publicado nuevamente según sus instrucciones. (Si fue así, lo siento. Pero por favor, continúa leyendo porque querrás saber esto). Esta se ha vuelto tan divulgada y legítima como una carta en cadena, lo cual es decir “mucho” y “no un poco, ni siquiera un poquito”.
¿Otra publicación que quizás hayas visto (o publicado)? La que dice que Facebook comenzará a cobrarle a los usuarios para mantener sus perfiles privados.
A todo esto: no. La única amenaza que esas publicaciones –que tanto te recuerdan a los correos en cadena– plantean es su existencia eterna.
Pero incluso una mayor tontería son estas publicaciones de “derechos de autor” que afirman que puedes quedar exento de esta fantasiosa infracción al compartir esta misma actualización de estado. Sí, como si se tratara de algún talismán que ahuyenta a los poderes del mal que amenazan tu privacidad en línea, ¡valiente usuario del Facebook!
Si fueras curioso, las condiciones reales de servicio indican lo siguiente: “Tú eres el propietario de todo el contenido e información que publicas en Facebook, y puedes controlar la manera en que es compartida mediante tus configuraciones de privacidad y uso”. Entonces… Además, hay una página de Snopes dedicada a este engaño, que se ha ido cultivando de manera intermitente desde el 2012.
Así que ahora que hemos desmentido esa información falsa acerca de lo que Facebook hace con tus datos, aquí hay cuatro cosas reales que ellos hacen con tus datos, de lo cual los usuarios pueden no estar conscientes.
1.- Tus imágenes valen más que mil palabras
Cuando subimos una imagen a Facebook, estamos compartiendo mucho más que una imagen de unas vacaciones o una fiesta de cumpleaños. Cada foto está repleta de datos EXIF; información que puede incluir cosas como qué tipo de cámara utilizaste, la configuración que usaste para la foto y, posiblemente, tu ubicación precisa con GPS habilitado.
Empareja eso con la tecnología de reconocimiento facial de Facebook y, de repente, le estamos dando a sus servidores (y a cualquiera que paga para tener acceso a ellos) datos valiosos acerca de qué personas van a dónde, a qué hora y con quién.
2.- Facebook lo sabe todo y nunca olvida
En Europa, donde hay más normas para proteger tu privacidad, dos personas pudieron solicitar y recibir datos de parte de Facebook que cubría todo lo que la compañía sabe acerca de ellos. Uno de los informes tenía 880 páginas… lo cual tiene sentido, si tomamos en cuenta que contenía datos sobre al menos 57 tipos diferentes de acciones, entre ellas:
Todas las solicitudes de amistad que el usuario alguna vez recibió, incluyendo las que fueron rechazadas
Cuáles dispositivos utilizó el usuario para iniciar sesión en Facebook… y otros usuarios que iniciaron sesión utilizando el mismo dispositivo
Todas las actualizaciones de estado del usuario, incluyendo las que fueron eliminadas
Todas las conversaciones de chat, que Facebook dice que no elimina
Aquí está todo.
También puedes solicitar descargar tus propios datos de Facebook aquí y esta es una lista de toda la información que contendrán.
3.- Antiguo: seguimiento en línea. Nuevo: seguimiento sin conexión
Facebook tiene que convencer a sus anunciantes actuales y potenciales de que la publicidad en su sitio aumentará sus ventas. Así que descubrió una manera de comprobar si estás comprando las cosas que ves anunciadas en Facebook, ya sea en línea o de manera física, mediante la colaboración con los servicios de datos al por menor, como Datalogix.
Estos servicios se asocian con varios minoristas y Facebook realiza las referencias cruzadas de la información de los clientes de esos minoristas con la información propia –por ejemplo, al identificar las mismas direcciones electrónicas– para ver quién está comprando qué. Los datos son anónimos, por lo que Facebook no ve tu nombre. Pero ellos (y los anunciantes) sí ven si terminaste comprando ese dentífrico que viste anunciado en tu sección de noticias.
4.- Cerrar Facebook no te hace invisible
¿Estás interesado en acampar? ¿Buscas muebles nuevos para tu dormitorio? ¿Has visitado algún sitio vergonzoso del que preferirías que tu pareja no se enterara? Bueno bueno Facebook no juzga, porque ya sabe todas estas cosas.
Las personas que dirigen Facebook mantienen un registro de 90 días de todos los lugares en donde has estado en línea que tienen uno de esos plug-ins de “Me gusta” para que, según sus palabras, “te muestren una experiencia personalizada en ese sitio”. Y ellos no solamente saben en dónde has estado en línea, sino cuándo has estado allí y cuál dirección IP has usado para tu visita… incluso si no estás en Facebook en ese momento. Algunos usuarios también han descubierto que el seguimiento continúa incluso cuando salen por completo de la sesión. Facebook ha dicho que está tratando de arreglar eso.
¿Otra de las cosas que dicen? Que también están a punto de comenzar a vender estos datos a los anunciantes.
Así que ahora que todo esto se ha aclarado, puedes reanudar los cronogramas que programas regularmente con tus perritos y artículos de política.