(CNN)– El Ministerio de Relaciones Exteriores de China convocó al embajador estadounidense en el país, Max Baucus, para expresarle su descontento sobre el buque de guerra que patrulló el martes en las disputadas aguas del Mar de China Meridional.
Un funcionario de defensa estadounidense dijo a CNN que el destructor USS Lassen “realizó un tránsito” a poco más de 19 kilómetros de las Islas Spratly –reclamadas por China- en la mañana del martes.
Cui Tiankai, embajador chino en Estados Unidos, dijo a Christiane Amanpour de CNN en una entrevista exclusiva que la operación de Estados Unidos es “una provocación muy seria, política y militarmente”.
Cui dijo que era un claro intento de Washington para militarizar la región.
“Es una posición muy absurda e incluso hipócrita pedir a los demás que no militaricen la región, mientras que uno mismo envía buques militares allí con tanta frecuencia”, dijo.
El mar de China Meridional está sujeto a numerosos reclamos territoriales –a menudo desagradables– con China, Brunéi, Malasia, Filipinas, Taiwán y Vietnam, los cuales disputan la soberanía de varias cadenas de islas y aguas cercanas.
En junio, China dijo que la construcción de una isla en el mar de China Meridional estaba “casi completa”, aunque dijo que continuaría construyendo instalaciones en las islas que ya ha creado.
En repetidas ocasiones, China ha dicho que su actividad en el mar de China Meridional no se dirige a ningún otro país ni afecta a la libertad de navegación por mar o por aire.
Gobierno chino: “No nos empujen”
El Ministerio de Relaciones Exteriores de China, advirtió de las consecuencias si un país causa problemas o aumenta las tensiones en los territorios que China reclama.
“Si cualquier país piensa que, a través de algunos trucos, serán capaces de interferir o incluso impedir que China participe en actividades razonables, legítimas y legales en sus propios territorios, quiero sugerir a los países que renuncien a tal fantasía”, dijo el portavoz del Ministerio, Lu Kang.
“De hecho, si las partes interesadas insisten en crear tensiones en la región y crear problemas de la nada, pueden obligar a China a sacar la conclusión de que tenemos que fortalecer y acelerar la acumulación de nuestras capacidades. Aconsejo a EE.UU. no crear una profecía autocumplida”.