CNNE 225000 - soda being poured into glass with ice

(CNN) — Chicos, pongan atención: hay otra razón para limitar su consumo de refrescos azucarados o endulzados artificialmente: podrían contribuir a la insuficiencia cardíaca.

Unos investigadores estudiaron los hábitos alimentarios de 42.000 hombres suecos a lo largo de 12 años y descubrieron que los hombres que bebían al menos dos bebidas azucaradas al día tenían un riesgo 23% más alto de sufrir insuficiencia cardíaca. El estudio se publicó el lunes en la revista British Medical Journal.

“La lección es que la gente que consume bebidas endulzadas regularmente debería pensar en limitar su consumo para reducir el riesgo de insuficiencia cardíaca”, dijo Susana Larsson, coautora del estudio y miembro del Karolinska Institutet de Estocolmo.

Cuando tu corazón no es lo suficientemente fuerte para bombear la sangre y el oxígeno que tu cuerpo necesita, sufres insuficiencia cardíaca.

‘Una vida muy miserable’

Es una vida muy miserable, dijo Roberto Bolli, director de medicina cardiovascular de la Escuela de Medicina de la Universidad de Louisville, Estados Unidos. “Los pacientes que tienen insuficiencia cardíaca tienen una capacidad limitada para hacer sus tareas cotidianas, les falta el aliento por esfuerzos muy pequeños tales como caminar una calle o a veces al caminar dentro de su propia casa”. A muchos les falta el aire cuando están en reposo, cuando están acostados, prosiguió Bolli, “y suelen levantarse en plena noche porque les falta el aliento, Se les hinchan las piernas; les duele el pecho. Es un perjuicio grave a su calidad de vida”.

La insuficiencia cardíaca es tan grave que, según la Heart Failure Society of America, “menos del 50% de los pacientes viven cinco años después de que se les hace un diagnóstico inicial y menos del 25% viven 10 años”.

Resultados y factores de riesgo

En este estudio, se preguntó a los hombres cuántos refrescos o bebidas endulzadas bebían al día o a la semana. Larsson dijo que su definición de bebidas azucaradas “solo incluía refrescos/gaseosas y que podían estar endulzadas con azúcar o con edulcorantes artificiales”. Se excluyó del estudio al té, al café y al jugo de frutas.

Es probable que los hallazgos se puedan aplicar en Estados Unidos, pero es necesario hacer más estudios, de acuerdo con Larsson. Esto se debe a que se centraron en hombres suecos de entre 45 y 79 años, así que los resultados no necesariamente se aplican a poblaciones más jóvenes, a mujeres o a ciertos grupos étnicos.

Las investigaciones anteriores han mostrado que las enfermedades cardíacas y las apoplejías están relacionadas con el consumo de bebidas azucaradas, pero ningún estudio se había centrado en la insuficiencia cardíaca, que es el mayor riesgo para los hombres y los adultos mayores.

El riesgo de insuficiencia cardíaca se asocia principalmente con la enfermedad de las arterias coronarias, la hipertensión fuera de control o un infarto previo que haya dañado el tejido del corazón. Sin embargo, los defectos cardíacos congénitos, tales como las anormalidades en las válvulas cardíacas, pueden provocar que la enfermedad se presente a cualquier edad. La apnea del sueño, la diabetes y la obesidad también son factores que empeoran la afección.