(CNN) – Una criatura exhausta parecida a un espíritu sale de las profundidades del océano y se ve sobrecargada por las toneladas de decadencia y desechos que conforman su largo traje.
Esta es solo una de las 9 fotos que aparecen en ‘La profecía’, una inquietante serie de imágenes creada por el fotógrafo belga-beninés Fabrice Monteiro y la estilista senegalesa conocida como Doulsy.
En la serie, la basura se convierte en prendas de alta costura. Monteiro explica que él usó la historia de la antigua diosa griega Gaia para construir su narrativa. Cada modelo es uno de los hijos de Gaia, los cuales personifican nueve de sus preocupaciones:
“Gaia, la madre tierra, está agotada por su incapacidad para mantener los ciclos naturales del planeta frente a los nuevos modos de vida y de consumo. Ella resuelve enviar a sus djinns (hijos), y permitirles que se les aparezcan a los humanos para entregar un mensaje de advertencia y empoderamiento”.
Con esta historia como punto de partida, Monteiro y Doulsy abordaron temas modernos como los residuos marinos, el calentamiento global y la cultura descuidada de consumo en las fotos.
Colaboración creativa
La serie se completó en el transcurso de dos años: “La colaboración con Doulsy fue extraordinaria en este proyecto. Yo ideaba el concepto y uníamos nuestra visión respectiva para crear los trajes. Alquitrán, arena, redes de pesca, escamas de pescado, corteza de árbol, cada material de vestuario tenía que referirse a una cuestión específica”.
Una vez que encontrábamos los materiales, el siguiente paso era la toma de fotografías en sí: “Todo en la realización de esta serie ha sido un reto. Desde la creación de los trajes hasta el acceso a determinados sitios. Cada imagen también tuvo que hacerse en cierta época del año: desde la temporada de inundaciones, hasta la temporada de tala y quema y la temporada de carbón”.
El arte como conversación
Monteiro cree que él es a la vez un foto periodista y un fotógrafo de moda, y anteriormente ha utilizado el arte de la fotografía para abordar los problemas sociales como el genocidio y la esclavitud.
Uno de sus primeros proyectos fue ‘Marrons’, el cual se enfocaba en la esclavitud en su ciudad natal, en Ouidah, Benin. Recientemente documentó a Baye Fall, una pequeña comunidad musulmana que se encuentra en Senegal, quienes a menudo son confundidos por rastafaris.
Monteiro cree que el arte es uno de los medios más eficaces para expresar su preocupación y espera que su nuevo trabajo con “La profecía” lo ayude a generar discusiones importantes.
“Cuando se trata de hablar acerca de las temas ambientales, obtienes ya sea cifras y estadísticas alarmantes, o imágenes de paisajes devastados. Pero con proyectos como ‘La profecía’, puedes hablarle a los corazones de las personas al mezclar los datos con el arte. Darle a este tema un elemento místico ayuda con la concienciación e impulsa a las personas a cambiar… y a cambiar ahora”.