LAS VEGAS (CNN) – Un eufórico Donald Trump predijo que saldría victorioso en el debate presidencial republicano de CNN esta semana.
“Tendremos una noche importante mañana por la noche”, dijo Trump mientras se dirigía a una estruendosa multitud en el Westgate Resort & Casino en la sección de Las Vegas Strip. “Nos va a ir bien”.
Trump también predijo que sería utilizado como saco de boxeo en el escenario.
“Todos me atacarán”, dijo. “Esta no va a ser una noche en el paraíso para mí, ¿estamos de acuerdo?”
Trump y otros 12 aspirantes republicanos a la Casa Blanca se preparan para subir al escenario del debate aquí en Las Vegas el martes por la noche, en el último enfrentamiento republicano del año.
Al dirigirse a miles de personas que se reunieron en un salón del hotel, Trump recordó el discurso que hizo para anunciar su campaña en junio.
“¿Recuerdan el famoso ascenso en las escaleras eléctricas?”, dijo, en referencia a la entrada que hizo al lobby de Trump Tower en Manhattan.
Desde que lanzó su campaña, dijo Trump, “han ocurrido muchas cosas buenas”.
El debate organizado por CNN llega ahora que Trump lidera en las encuestas nacionales. Una encuesta de la Universidad de Monmouth publicada el lunes ubicó a Trump en la primera posición con el 41% del apoyo de los votantes republicanos y de aquellos con tendencia republicana, lo que representa un nuevo récord para el magnate de Nueva York.
Pero su posición como líder en Iowa ha sufrido una mala racha, ya que el senador por Texas, Ted Cruz, lo ha superado por primera vez en algunas encuestas.
El lunes, Trump hizo énfasis en sus cifras a nivel nacional, le restó importancia al ascenso de Cruz en Iowa y en parte lo atribuyó a los medios “deshonestos”.
“Es un diario terrible”, dijo Trump sobre el Des Moines Register, el cual publicó una encuesta en el transcurso del fin de semana en la que Trump aparecía 10 puntos detrás de Cruz en Iowa, con el 31% frente al 21%.
El discurso característicamente colorido y grandilocuente de Trump fue interrumpido en varias ocasiones por manifestantes —algo que no es poco frecuente en los mítines de Trump hoy en día— y algunas personas incluso portaban carteles que decían “Dump Trump” (Dejen a Trump).
Trump prometió tomar medidas enérgicas contra la inmigración ilegal, construir un muro en la frontera entre Estados Unidos y México, y construir un ejército poderoso cuando fuera presidente.
“Vamos a hacer que nuestro ejército sea tan fuerte, tan poderoso, tan increíble que nunca vamos a tener que usarlo”, dijo Trump. “¡Juntos seremos los mejores!”