Investigadores capturaron a 10 pingüinos rey machos con una elevada masa corporal y los filmaron caminando en una cinta de correr antes y después de un ayuno de 14 días.

(CNN) – En las heladas aguas de las islas subantárticas de Crozet, es natural desarrollar una o dos capas adicionales de grasa de invierno.

Y un video recién publicado muestra a algunos de los pingüinos rey en una colonia en dichas islas que caminan en cintas de correr.

No se trata de un programa de pérdida de peso aviar.

El ejercicio es parte de un experimento realizado por un equipo de científicos que investigan la biomecánica de la torpe forma de andar del pingüino rey.

El equipo, liderado por Astrid Willener del departamento de ciencias de la vida de la Universidad de Roehampton, llevó a cabo la investigación en Baie du Marin en la isla de la Posesión, donde cientos de pingüinos rey, la segunda especie de pingüinos más grande, llegan a la orilla para reproducirse todos los años.

Una colonia de pingüinos rey se reúne en la isla de la Posesión.

Los investigadores capturaron a 10 pingüinos rey machos con una elevada masa corporal y los filmaron caminando en una cinta de correr antes y después de un ayuno de 14 días, a fin de observar las diferencias en su modo de andar cuando tenían más grasa y cuando estaban más delgados.

Willener dijo que los pingüinos recibieron entrenamiento para caminar en la cinta antes de ser puestos a prueba a velocidades de 1,6 km por hora durante máximo 10 minutos.

“Al principio estaban un poco sorprendidos, pero en realidad lo aprendieron muy rápido”, dijo.

“Los pingüinos se acostumbran a eso. En cierta forma sabían que cuando se escuchaba el sonido, la cinta caminadora empezaba a funcionar”.

Aunque la mayoría lo aprendió rápidamente, algunas de las aves más perezosas hicieron trampa al hacerse para atrás y “hacer un tipo de esquí”, dijo.

Los pingüinos gordos son menos estables al caminar

El pingüino rey, que puede llegar a crecer hasta 1 metro de altura y pesar 16 kilogramos se somete a un “enorme cambio de masa corporal” cuando ayuna durante la temporada de apareamiento, al perder hasta un cuarto de su peso corporal, le dijo Willener a CNN.

El objetivo de los investigadores era determinar si las distintas formas de andar cambiaban con variaciones en la masa corporal de los pingüinos.

Los pingüinos rey pasan la mayor parte de su tiempo nadando y se alimentan de pescados y calamares. Cuando regresan a tierra durante el período de apareamiento, a menudo caminan largas distancias hasta la colonia de crianza y llevan una gran acumulación de grasa al frente, al igual que comida en sus estómagos para alimentar a sus crías.

Cuando llegan a la colonia, debido a que no tienen acceso a pescados, los pingüinos tienen que ayunar durante hasta un mes y sobreviven gracias a sus depósitos de grasa.

Willener dijo que los investigadores tenían curiosidad sobre cómo el ave, para la que nadar es su principal forma de locomoción, lograba mantenerse erguida en distancias tan largas y luego de ver cambios tan radicales en su masa corporal.

El resultado mostró que los pingüinos con una mayor masa corporal eran menos estables que los delgados, pero en conjunto aún eran capaces de caminar a un ritmo constante.

Los hallazgos fueron respaldados por observaciones anteriores en relación a que los pingüinos rey con una mayor masa corporal que regresan del mar tenían más probabilidades de caerse que los que habían estado ayunando, lo que los hacía más vulnerables a los depredadores.