Marco Rubio y Donald Trump están en medio de una creciente guerra de palabras, como resultado de los ataques de Rubio contra Trump durante el último debate.

(CNN) – Donald Trump es objeto de críticas por culpar a un auricular defectuoso para explicar su negativa inicial a rechazar al Ku Klux Klan.

“No me importa qué tan defectuoso haya estado el auricular, Ku Klux Klan se escucha con bastante claridad”, dijo el rival presidencial republicano Marco Rubio el lunes, durante un mitin en Tennessee.

El domingo, Jake Tapper de CNN le había preguntado a Trump sobre el apoyo de KKK y David Duke a su campaña, a lo cual Trump en repetidas ocasiones dijo que “no conocía” a Duke o a los grupos supremacistas blancos lo suficiente como para rechazarlos.

“Cuando me dices ‘David Duke’, inmediatamente digo ‘racista’”, dijo Rubio en Atlanta en una manifestación el lunes. “¿Por qué no iba a condenar al Ku Klux Klan? No hay cabida en el movimiento conservador y no hay cabida en el Partido Republicano para los miembros del Ku Klux Klan o racistas como David Duke”.

El lunes, Trump dijo que no podía oír la pregunta debido a un auricular defectuoso.

“No me importa rechazar a David Duke”, le dijo Trump al programa “Today” de NBC. “Rechacé a David Duke el día anterior en una conferencia de prensa. Estaban allí, CNN estaba allí, y me dieron un auricular pésimo”.

Otros republicanos, desde la gobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, quien apoya a Rubio, hasta Mitt Romney, quien ahora se ha negado a apoyar a un candidato, también criticaron la vacilación de Trump.

Rubio reclutó a Haley para que lo ayudara en la campaña electoral, y ella también se involucró en la conversación.

Haley, quien es de origen indio, hizo referencia a los tiroteos en la iglesia de Charleston en el 2015, en el que un hombre blanco mató a nueve personas en una iglesia históricamente de negros.

“Vimos y fuimos testigos del verdadero odio el año pasado”, dijo Haley, levantando la voz. “No me detendré hasta que luchemos contra un hombre que opta por no rechazar al KKK, quien no es parte de nuestro partido y a quien no queremos como presidente; no permitiremos eso en nuestro país”.

El magnate de los negocios fue apoyado por el exlíder del Klan el jueves.

El excandidato presidencial Mitt Romney también atacó a Trump el lunes.

“Una respuesta descalificadora y desagradable por parte de @realDonaldTrump en cuanto al KKK. El hecho que acepte la intolerancia repugnante no está en el carácter de Estados Unidos”, tuiteó Romney, quien ha estado atacando activamente a Trump durante días.

El secretario de prensa de la Casa Blanca, Josh Earnest, no condenaría los comentarios, al decir que depende de Estados Unidos decidir con base en los mismos. Sin embargo, dijo que hay suficiente información para tomar una clara decisión.

“Sé que el Sr. Trump dice que necesita conocer más sobre el Sr. Duke antes de emitir alguna opinión. Creo que ahora sabemos todo lo que necesitamos saber sobre el Sr. Trump para tener nuestra propia opinión personal de su candidatura”.

Kasich también rechazó la supremacía blanca en CNN el lunes, cuando se le preguntó sobre la respuesta de Trump.

“No sé qué tiene en la cabeza”, le dijo el gobernador de Ohio a Alisyn Camerota de CNN en “New Day”. “Lo único que sé es que los grupos de supremacía blanca no tienen cabida en nuestra sociedad y claramente no tienen cabida en el Partido Republicano”.

Incluso el avalista de Trump, el senador de Alabama, Jeff Sessions, dijo el lunes que Trump tiene que dejar en claro cuál es su posición.

“Creemos en la igualdad y en el trato justo, y a ese principio moral nos adherimos como nación; espero que deje eso en claro”, dijo Sessions en “The Matt Murphy Show” cuando se le preguntó al respecto el lunes. “Él rechazó esto antes, y te hacen este tipo de preguntas, no sé lo que pasó. Pero diré esto, él tiene que dejar eso en claro”.

Rubio y Trump están en medio de una creciente guerra de palabras, como resultado de los ataques de Rubio contra Trump durante el debate del jueves por la noche.

El lunes, Rubio se defendió en un punto: el ataque de Trump sobre el tamaño de sus orejas.

“¿Saben cómo son mis orejas? Son como Dios las hizo”, le dijo Rubio a la multitud de Atlanta, entre aplausos.

Pero Rubio y Haley también lanzaron muchos insultos contra Trump, para darle continuidad a sus recientes discursos de ataques desde el debate de la semana pasada.

“Donald Trump es todo lo que les enseñé a mis hijos que no hicieran cuando estaban el jardín infantil”, bromeó Haley con la multitud. “Les enseñé a mis dos hijos pequeños que no mientes e inventas cosas… No intimidas a la gente y le dices qué crees que debería suceder… Además, les enseñé a mis dos hijos pequeños lo que Marco Rubio hizo exactamente en el que el último debate: cuando un acosador te golpea, lo golpeas de vuelta”.

Ella también le hizo un llamado a Trump para que publicara sus declaraciones de impuestos… a lo cual dijo que no podía porque estaban siendo auditadas.

“Soy contadora: te puedo decir que no existe ninguna auditoría que impida que publiques tus declaraciones de impuestos. Donald Trump, publica tus declaraciones de impuestos”, dijo.

Rubio le había pedido a Haley que hablara en su nombre ya que perdió su voz, pero luego ofreció un prolongado discurso de campaña lleno de ataques hacia Trump.

Dijo que realmente decidió salir a la ofensiva cuando vio un extenso informe sobre la Universidad Trump.

“Allí fue cuando la sangre me comenzó a hervir”, dijo Rubio, al describir que vio un video promocional de Trump en el que prometía a los posibles estudiantes que “ganarían, ganarían y ganarían” si le daban dinero del programa.

“Déjenme decirles por qué eso me erizó la piel. Porque eso es lo que ahora les está diciendo a los votantes”, dijo Rubio, reiterando sus líneas de que Trump es un” estafador” que está cometiendo una “estafa” en Estados Unidos.

Atacó a Trump sobre algunos frentes comunes, incluyendo el ser repetitivo:

“Cuando lo hice, fue una catástrofe. Cuando él lo hizo, ‘oh, él transmite el mensaje adecuado’”, dijo Rubio. Además agregó: “Si él es un robot, fue hecho en China”.

Al querer cambiar las leyes de difamación para ir tras los medios de comunicación, o como él mismo dijo, al cambiar la Primera Enmienda para ir tras la gente que a Trump no le gusta:

“No hay suficientes jueces en el mundo para oír todos esos casos”.

Y sobre la política exterior, incluyendo estar a cargo de los códigos nucleares y tener que lidiar con el presidente ruso Vladimir Putin:

“Él no es el tipo de desarrollador de bienes raíces de todo el país con el que estás haciendo un trato”, dijo Rubio. “Él aprovechará a Donald Trump. …Este no es un problema sobre el que puedes recibir un curso en la Universidad Trump”.

Rubio concluyó con una advertencia de que si Trump gana la nominación republicana, será destrozado en una elección general, lo que garantiza una victoria demócrata en el otoño.

“En el mismo momento en que se convierta en nuestro candidato, la prensa, los demócratas y todos estos grupos caerán sobre él como jaurías y lo destrozarán”, dijo Rubio. “Un voto por Donald Trump mañana es un voto para Hillary Clinton en noviembre”.

Kevin Liptak contribuyó con este reporte.