(CNN) – Qué tanto —o qué tan poco comes— podría influenciar tu tiempo de vida.
La idea de que el control de calorías mejore tu salud, y por lo tanto, tu esperanza de vida, no es nada nuevo, pero los investigadores ahora esperan determinar con precisión el tipo de dieta que podría hacer que vivas más.
Un equipo en la Universidad del Sur de California (USC) ha reducido el total de calorías hasta el nivel más bajo posible, utilizando alimentos específicos para engañar al cuerpo humano a fin de que crea que está ayunando, un proceso conocido como imitación de ayuno.
“Las dietas pueden tener un efecto notable en ti”, dice Valter Longo, profesor de gerontología en USC Davis, quien desde hace mucho tiempo ha estado investigando los mecanismos detrás del envejecimiento humano y recientemente ha volcado su atención al ayuno.
“Puede reprogramar tu cuerpo y ponerte de camino para que vivas más”, dice Longo.
Cierre y regeneración
El ayuno ha sido realizado por comunidades y culturas durante miles de años, y el equipo de Longo tiene curiosidad por ver las ventajas.
Su idea se basa en la antigua tendencia de la restricción calórica, en su mayoría conocida a través de dietas como la dieta 5-2 y el ayuno intermitente. Longo probó el impacto del ayuno durante cinco días consecutivos cada mes, creyendo que cuando el cuerpo piensa que se encuentra en un estado de ayuno, se cierra y entra en modo de reserva.
“Mientras mueren las células y el cuerpo entra en estado de reserva, tus células madre se activan”, dice Longo. Una vez activadas, las células madre pueden regenerar las células y masa corporal que se ha perdido… lo que te deja como nuevo.
Cuando las células en el cuerpo envejecen, sus proporciones cambian y Longo cree que la reacción del cuerpo —y los métodos de reparación— al ayuno ayudan a restaurarlas a cuando eras más joven. “Matas las células malas y las regeneras con células que son más funcionales”.
Estrategias de inanición
En un estudio de 2015, el equipo de Longo estableció una dieta específica para voluntarios humanos, la cual imitaba los efectos del ayuno en el transcurso de cinco días consecutivos al mes, durante tres meses. También se llevaron a cabo pruebas en ratones.
Las personas consumían aproximadamente 1.000 calorías el día uno y 725 calorías durante los siguientes cuatro días, pero estas cifras solamente no determinaban el beneficio.
“No solo se trata de reducir las calorías”, dice Longo. Su dieta está diseñada para incluir porcentajes específicos de proteínas, grasas y carbohidratos, para tener un efecto máximo. Sin embargo, los alimentos que se utilizaron fueron específicos para la prueba y si se traducen al público, involucrarían diseñar comidas conformadas por la combinación adecuada de nutrientes.
“El programa de la dieta que imita el ayuno es un programa de dieta basada en plantas para obtener los efectos parecidos al ayuno mientras proporciona alimentos micronutrientes (vitaminas, minerales, etc.) y minimiza la carga del ayuno”, dijo Longo en el estudio.
Después de tres meses, los beneficios fueron una reducción en el peso corporal, al igual que ciertos factores de riesgo para las enfermedades cardiovasculares. También hubo un aumento de ciertas células madre en el cuerpo.
“La dieta activa la capacidad que el cuerpo tiene de renovarse a sí mismo”, dice Longo.
Desde entonces, el equipo ha calculado que seguir la dieta cada tres meses podría proporcionar suficiente impacto, ya que se cree que los efectos durarán hasta seis meses.
¿Cómo funciona?
“Cuando ayunas, bajas las proteínas y ciertos aminoácidos, y controlas los caminos en el cuerpo”, dice Longo. Los caminos a los que se refiere se conocen como los caminos TOR, PKA e IGF, los cuales cuando se controlan, pueden activar ciertas reacciones dentro del cuerpo, y estas hacen hacen que las células inmunes mueran y los órganos se encojan.
Esta activación, o reducción, de caminos, es la razón por la que los componentes de la dieta, como las proteínas, también deben ser controlados. “No activarás los caminos correctos”, dice Longo.
“Cuando haces el IGF menos activo, esto reduce los factores de riesgo vinculados con la diabetes y las enfermedades cardiovasculares”, dice Miguel Toribio-Mateas, presidente de la Asociación Británica para la Nutrición Aplicada y la Terapia Nutricional.
Según Toribio-Mateas, los resultados confirman las teorías anteriores en relación a que “algunos factores de crecimiento parecidos a las hormonas que son requeridos durante el desarrollo para el crecimiento, luego se convierten en agentes promotores del envejecimiento cuando se alcanza la madurez sexual y de desarrollo”. Él también cree que los beneficios se reducen a una mayor eficiencia a nivel celular.
“Las células tienen una lista de cosas por hacer todos los días… como deshacerse de las toxinas”, dice Toribio Mateas. Si su carga de trabajo es interrumpida por la necesidad de almacenar calorías extra, es posible acumular ciertos productos. “Regular las calorías puede tener un efecto muy positivo”, dice. Para él, la dieta sustenta la longevidad.
¿Es seguro?
A diferencia de la dieta 5-2, la cual requiere dos días de bajas calorías en cualquier momento en la semana, la dieta de Longo involucra ayunar durante cinco días consecutivos, lo cual requiere de mucha más fuerza de voluntad.
“Cinco días es seguro: hacer un ayuno más prolongado es difícil afuera de una clínica”, dice Longo.
Es necesario trabajar más para ajustar la dieta y determinar las comidas que cumplen con los criterios. Longo ha fundado su propia compañía de nutrición. L-Nutra vende productos que cumplen con este propósito, lo cual podría ser considerado como un conflicto de intereses. Él dice que las ganancias serán utilizadas para financiar otros proyectos de investigación realizados por su equipo.
“Los resultados del estudio son alentadores y justifican que se realice más investigaciones en este campo”, dice Toribio-Mateas.