(CNN) – La investigación comenzó cuando alguien supuestamente vio a un técnico quirúrgico sacar a escondidas de una carretilla en un quirófano de Colorado una jeringa llena de un potente medicamento para el dolor.
Ahora, la investigación se ha extendido e incluye hospitales al menos en otros 3 estados.
En Colorado, Arizona, California y Washington, casi 5.000 pacientes han sido informados de que podrían haber estado expuestos a hepatitis B, hepatitis C o VIH cuando se sometieron a una cirugía. Los anuncios que les recomiendan a los pacientes que se sometan a pruebas han suscitado preocupación y amenazas de acciones legales.
Los hospitales involucrados –al menos seis, según las últimas cuentas de CNN– tienen algo en común: el técnico quirúrgico que está acusado de cambiar jeringas llenas del analgésico líquido fentanilo y, posiblemente, haber puesto la seguridad de los pacientes en riesgo, alguna vez fue parte de su personal.
Rocky Allen, de 28 años de edad, ha sido acusado por cargos de manipulación de un producto del consumidor y por obtener una sustancia controlada mediante el engaño, anunciaron funcionarios federales el mes pasado. Él se declaró no culpable en la corte federal en Colorado. Se decidió que el caso irá a juicio en agosto.
Desde que el supuesto incidente en el Swedish Medical Center en Englewood, Colorado, salió a luz por primera vez en febrero, una serie de hospitales donde Allen trabajó antes dice que ha estado comunicándose con los pacientes.
Esta semana, dos hospitales en Washington dijeron que estaban notificándole a los pacientes y recomendándoles que se hicieran pruebas.
Northwest Hospital & Medical Center en Seattle dijo que ellos se han comunicado con unos 1.340 pacientes. Además, Lakewood Surgery Center en Lakewood, Washington, dijo que ellos le estaban notificando aproximadamente a 135 pacientes.
Ambos hospitales dijeron que no tenían evidencia de que los pacientes hubieran estado expuestos, que el riesgo era “extremadamente bajo” y que estaban notificándole a las personas para extremar las precauciones.
“Recientemente nos enteramos de que un tecnólogo quirúrgico empleado brevemente en Lakewood Surgery Center a finales de 2011 ha sido acusado de desviar narcóticos inyectables en California, Arizona y Colorado, y ha sido acusado de actividad criminal relacionada con este supuesto desvío en Colorado”, dijo el centro en un comunicado en su página web.
Los hospitales dijeron que ahora las autoridades de salud locales y estatales en Washington también están investigando.
“Nos entristece profundamente que las acciones de un antiguo empleado puedan haber colocado a nuestros pacientes en riesgo, y entendemos la preocupación que esta notificación pueda causarle a nuestros pacientes y a sus seres queridos”, dijo Northwest Hospital en un comunicado en su página web.
Formulación de cargos detalla la acusación
La formulación de cargos presentada en un tribunal federal de Colorado acusa a Allen de manipulación de una jeringa que contenía medicamento para el dolor y adquirir a sabiendas el medicamento “mediante engaño y subterfugio”.
Los funcionarios afirman que Allen lo hizo “con indiferencia temeraria frente al riego de que otra persona se viera en peligro o sufriera lesiones corporales, y bajo las circunstancias manifestó una indiferencia extrema frente a tal riesgo”.
Los investigadores no han publicado detalles sobre lo que supuestamente ocurrió, pero han dicho que una investigación criminal sobre la conducta de Allen está en curso.
Su defensor público federal no ha respondido a las solicitudes de comentarios de parte de CNN.
De acuerdo con The Denver Post, el abogado, Timothy O’Hara, le dijo a la corte el mes pasado que los problemas de drogas de su cliente comenzaron cuando sirvió en la Armada.
“Todos los días, la muerte estaba sentada y tendida ante él”, dijo O’Hara, cuando describió los turnos de 12 horas en los que Allen trabajó durante su despliegue de 10 meses.
“Como uno podría imaginar, él no regresó de la misma manera en que se fue”, dijo O’Hara. “A él se le dio de baja de manera general en base a un incidente que ocurrió mientras estaba en las fuerzas armadas y que estuvo relacionado con una conducta similar”.
Según las palabras de un portavoz de la Armada, el periódico Denver informó que Allen fue juzgado en consejo de guerra en 2011 por el robo de fentanilo cuando estuvo desplegado con una unidad del Ejército en Afganistán.
Abogado: clientes han dado positivo
Según los reguladores del estado de Colorado, Allen supuestamente sacó una jeringa que contenía el medicamento para el dolor fentanilo de una carretilla de anestesia y lo reemplazó con otra jeringa con una etiqueta que leía “en las primeras etapas de un procedimiento quirúrgico”, el 22 de enero. Los fiscales dicen que la jeringa de reemplazo contenía otra sustancia.
La orina de Allen más tarde dio positivo para fentanilo, dijeron los reguladores en una orden de suspensión de su licencia en enero.
Los documentos legales presentados por los fiscales federales también indican que Allen fue colocado en licencia administrativa, mientras trabajaba en un hospital de California después de que presuntamente cambió jeringas en un quirófano y ocultó una jeringa llena de fentanilo dentro de su calcetín, y que fue despedido de un trabajo en un hospital de Arizona después de dar positivo para el medicamento.
Un abogado en Colorado ha dicho que dos de sus clientes, quienes se sometieron a una cirugía en el Swedish Medical Center, han dado positivo para hepatitis B. Sin embargo, los funcionarios de salud aún no han confirmado ninguna infección.
En 2009, una técnica quirúrgica en otro hospital de Colorado infectó a 19 pacientes con hepatitis C después de que se inyectara a sí misma con jeringas que contenían su medicamento para el dolor y que luego reemplazara el medicamento para el dolor en sus jeringas con solución salina. Kristen Diane Parker se declaró culpable de varios cargos federales y fue condenada a 30 años de prisión.
Sheena Jones y Debra Goldschmidt de CNN contribuyeron con este reportaje.