Una de las propuestas de Bernie Sanders es dar apoyos económicos para la universidad a los estadounidenses.

(CNNMoney) – La universidad gratuita suena fabuloso, ¿pero puede funcionar en Estados Unidos?

Bernie Sanders cree que sí.

“¿Universidades públicas con matrícula gratuita? ¡Ya lo creo! Eso es exactamente lo que debemos hacer”, dijo el candidato en el debate demócrata de Brooklyn.

A lo que Hillary Clinton respondió: “Si alguien te promete algo gratis, lee la letra pequeña”.

Pues bien, ¿cuál es la letra pequeña en el plan de matrícula gratuita de Sanders?

1. Sólo aplica para escuelas públicas

Eso cubre aproximadamente al 68% de los estudiantes universitarios en Estados Unidos, de acuerdo con el Pew Research Center.

Las escuelas privadas probablemente quedarían excluidas. Por lo general cobran más por la matrícula, pero a menudo ofrecen más ayuda financiera. Algunas escuelas privadas como Harvard y Yale ya son “libres de deudas”, lo que significa que no te cobrarán más de lo que creen que tu familia puede pagar.

2. Puede que no incluya alojamiento y comida

La legislación propuesta por Sanders el año pasado cubriría la matrícula y cuotas requeridas.

Sin embargo, en algunas universidades, el alojamiento y la comida es lo que más cuesta. Este año los estudiantes de centros públicos pagaron un promedio de 14.000 dólares, pero sólo alrededor de 4.000 dólares fueron destinados a la matrícula, según The College Board. Los restantes 10.000 dólares fueron para alojamiento y comida.

Aunque ese gasto no queda automáticamente eliminado, Sanders no quiere que los estudiantes se endeuden para pagar por habitación y alimentación, libros y otros gastos. Si se determina que esos rubros cuestan más de lo que tu familia puede pagar, obtendrás subvenciones estatales o federales para cubrir el costo.

3. Aún así ayudaría a muchos estudiantes

Un gran porcentaje de las familias no puede permitirse actualmente el costo total de la universidad pública y terminan pidiendo dinero prestado. En 2009, el 60% de los graduados de las escuelas públicas habían tomado un préstamo federal para financiar su educación, de acuerdo con The College Board.

Sanders seguramente mantendría los programas de ayuda federal que ofrecen becas y préstamos, y exigiría que los estados mantuvieran sus propios programas de ayuda financiera basados en estudios socioeconómicos. Su plan también reduciría la tasa de interés cobrada por los préstamos federales estudiantiles y ampliaría el programa federal de empleo y estudio.

4. No sería exactamente gratuita

Alguien tendría que pagarla. Bajo el plan de Sanders, la cantidad de dinero que suele recibir una universidad por la matrícula ahora estaría cubierta por los gobiernos federal y estatales.

El gobierno federal aportaría el 67% (47.000 millones de dólares al año) y los estados cargarían con el resto (23.000 millones de dólares al año)

Los fondos adicionales del gobierno federal vendrían de lo que Sanders ha llamado un “impuesto Robin Hood sobre Wall Street”.

Esto probablemente sería adicional a las contribuciones que ya hace el gobierno a la educación superior. Según el Pew, las autoridades federales actualmente gastan unos 76.000 millones de dólares (que principalmente fluyen a las universidades a través de ayudas financieras concedidas a los estudiantes y subvenciones para temas específicos de investigación) y los estados pagan alrededor de 74.000 millones de dólares.

5. La propuesta será difícil de vender

En primer lugar, el Congreso tendría que legislar sobre la aplicación del impuesto sobre las transacciones financieras. Y luego cada estado tendría que decidir si participa en el programa, lo que podría significar aportar más fondos a la educación superior de los que ya aportan.

Convencerlos podría ser difícil porque los estados con problemas económicos ya están teniendo dificultades para mantener el nivel actual de ayuda a las universidades. En Illinois, por ejemplo, el actual impasse presupuestario del estado y los años de disminuciones en los fondos estatales han obligando a varias universidades del estado a tomar medidas drásticas sólo para mantenerse a flote.

6. Ya existen programas de matrícula gratuita

Tennessee y Oregon ya han logrado que los colegios comunitarios sean de matrícula gratuita utilizando los fondos estatales. El programa de Tennessee comenzó el pasado otoño, se financia con los ingresos de la lotería y cuesta un promedio de 1.165 dólares por estudiante al año. Y este año atrajo a una ola de nuevos estudiantes al sistema estatal de colegios comunitarios o “community colleges”.

Oregon tiene un programa similar que matriculará a sus primeros estudiantes en agosto. Se denominan programas de becas “last dollar”, por lo que se activan después de que los estudiantes agotaron sus subvenciones federales u otras becas.

La ciudad de Detroit está utilizando donaciones privadas para financiar un nuevo programa de matrícula gratuita para sus colegios comunitarios. Más adelante una parte del dinero provendrá de impuestos a la propiedad ya etiquetados para el programa.

Louisiana tiene una de las ofertas de becas más generosas, aunque no lleva el nombre de matrícula gratuita. Al presente es usada por 47,000 residentes y cubre el costo de la matrícula para los estudiantes que cumplen con ciertos estándares académicos. Pero los fondos del programa están en peligro porque el estado enfrenta un enorme déficit presupuestario.