El juez Gonzalo Curiel (izq.) ha recibido duros ataques de Donald Trump.

(CNN) – Donald Trump, quien seguramente será el candidato republicano a la presidencia de Estados Unidos, se ha referido al juez federal Gonzalo Curiel como un “enemigo”, ha puesto en duda su capacidad de actuar con justicia en el caso de una demanda contra la Universidad Trump y ha insinuado, enigmáticamente, “que deberían fijarse con detenimiento en el juez Curiel”.

El juez nacido en Indiana es “un mexicano”, ha dicho Trump en repetidas ocasiones, presentando a Curiel como una persona vengativa y sin temple.

Sin embargo, basta con echar un vistazo al registro público de Curiel para poner en entredicho, si no desmentir completamente, las insistentes acusaciones de Trump. Y legisladores de ambos partidos, juristas y defensores de los derechos civiles han criticado la retórica de Trump.

Curiel se ha mantenido callado, en cumplimiento del código de conducta de los jueces, según afirmó su oficina. Su hermano, Raúl Curiel, dijo a CNN: “Sé que mi hermano no se lo toma en serio. Algunas otras personas podrían hacerlo… Creo que Trump piensa que esta división le favorece, pero que en realidad está creando una mayor división”.

Estas son cinco cosas que debe saber sobre el juez federal objetivo ahora de los ataques del aspirante republicano.

1. Blanco de un cartel de la droga mexicano

Antes de ser nombrado para un cargo de juez a nivel estatal en 2006, Curiel trabajó como fiscal federal en el sur de California, donde se enfocó en casos de drogas - y con ellos, en los carteles mexicanos.

A finales de 1990, los esfuerzos de Curiel para extraditar a México a unos presuntos sicarios lo pusieron directamente en el punto de mira de los traficantes. El diario Los Angeles Times informó entonces que, según documentos de la corte “un lugarteniente del cártel del narcotráfico Arellano Félix”, dijo a otro reo que planea asesinar a “Curiel y que había solicitado y recibido permiso de los líderes del cartel de los Arellano”.

Enseguida se reforzó la seguridad de Curiel, incluyendo guardaespaldas que viajaban con él hasta que pasó la amenaza. Luego, entre 1999 y 2002, fue el abogado principal de una fuerza de tareas contra el crimen organizado del narcotráfico.

“Durante este período, dirigió una unidad de investigación de más de 20 agentes federales y cuatro fiscales federales adjuntos que extraditaron y procesaron con éxito a líderes, asesinos y miembros del tristemente célebre cártel de los Arellano Félix”, dijo la oficina de la senadora Barbara Boxer en una declaración tras su nominación en 2011 a la corte federal.

En 2012, el senador Richard Blumenthal presentó a Curiel en su audiencia de confirmación como un juez de “experiencia extraordinaria” y décadas en los tribunales.

“Uno de los casos más significativos implicó el procesamiento del cártel de los Arellano Félix, una red multimillonaria de tráfico de drogas responsable de más de 100 muertes en Estados Unidos y México”, dijo.

2. El elegido de Schwarzenegger

“El juez fue designado por Barack Obama”, dijo Trump a sus seguidores durante un discurso en San Diego el 27 de mayo, el día en que Curiel ordenó la divulgación de los documentos relacionados con la demanda contra la Universidad Trump.

Pero la trayectoria de Curiel de la fiscalía a la judicatura comenzó mucho antes de la nominación del presidente Barack Obama en noviembre de 2011. El entonces gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, un republicano, nombró a Curiel en 2006 como miembro de la corte superior del estado, donde estuvo seis años antes de llegar a la corte federal.

Schwarzenegger reafirmó su apoyo a Curiel el lunes al tuitear: “el juez Curiel es un héroe estadounidense que se enfrentó a los carteles mexicanos. Tuve el honor de nombrarlo cuando era gobernador”.

3. Hijos de inmigrantes: Curiel y Trump

“Mis padres vinieron aquí desde México con un sueño de dar oportunidades a sus hijos”, dijo Curiel en su presentación a la Comisión de Justicia del Senado en 2012. “Y han logrado hacerlo con las oportunidades que este país tiene que ofrecer”.

El futuro juez federal nació en East Chicago, Indiana, en 1953. Sus padres, ambos inmigrantes de Jalisco, México, eran ciudadanos naturalizados.

El hermano de Curiel, Raúl, dijo a The New York Times que su padre entró por primera vez al país como obrero en Arizona en la década de 1920. Eso significaría que el padre de Curiel llegó a EE.UU. incluso antes que la propia madre de Trump (que llegó en la década de 1930), quien - al igual que Curiel - se convirtió en ciudadana al casarse con su padre.

“Mi preocupación es que (los ataques de Trump están) lastimando a otras personas. Está perjudicando nuestra imagen como hijos de inmigrantes. Hace daño a nuestro pueblo en general”, dijo Raúl Curiel en entrevista con CNN el lunes. “Siendo hispano, me duele este tipo de cosas. No me duele personalmente. Y no creo que le duele a mi hermano personalmente. Estamos por encima de ese tipo de cosas”.

4. Nacido y criado en Indiana

Curiel creció, fue a la universidad y comenzó su vida profesional en el estado de Indiana.

Graduado en 1976 en la Universidad de Indiana, se quedó en Bloomington para estudiar leyes, e inició su práctica privada en Dyer, una ciudad a las afueras de su localidad natal, tres años más tarde. Curiel pasaría siete años allí, antes de mudarse a Monterey, California, para continuar su trabajo privado en 1986.

Se unió a la oficina del fiscal federal del Distrito Sur de California en 1989, y luego fue promovido a fiscal adjunto de Estados Unidos en 2002.

5. “No estoy ahí para hacer la ley”

Trump ha tratado de minar la credibilidad de Curiel insinuando que no podría separar las políticas personales de la ley constitucional. Pero un intercambio durante la audiencia de confirmación del juez en 2012 con el senador Blumenthal, un demócrata de Connecticut, sugiere que Curiel tiene una visión más moderada de su función actual.

Blumenthal le preguntó cómo veía “el papel de un juez de distrito frente al de una corte de apelaciones”.

“Como juez de una causa reconozco que no estoy ahí para hacer la ley”, dijo Curiel. “No estoy ahí para interpretar la ley; estoy ahí para hacer cumplir la ley establecida por el precedente de nuestra Corte Suprema”.