(CNN) – Luego de que el pueblo británico votara decididamente a favor de abandonar la Unión Europea, emerge una nación profundamente polarizada.
Más de 30 millones de personas en Inglaterra, Escocia, Gales, Irlanda del Norte -e incluso en la pequeña Gibraltar- fueron a las urnas, y 51,89% de ellos decidió que Gran Bretaña sería el primer país en abandonar el bloque de 28 miembros.
Pero 48% de los electores estuvieron en desacuerdo con esa decisión, dejando una fotografía geográfica muy clara. Londres, Escocia e Irlanda del Norte querían quedarse, mientras que los votantes en Gales y todas las regiones inglesas fuera de la capital respaldaron la campaña a favor de salir.
La decisión ya orilló a la renuncia del primer ministro David Cameron.
Apenas un año después de que Cameron llevara a su partido a una mayoría parlamentaria, muchos de los tradicionales núcleos conservadores en el país parecían ponerse en contra de su líder después de una apasionada -y a veces amarga- campaña enfocada en la economía y la inmigración.
Y las repercusiones podrían afectar también la propia unidad británica.
¿Un segundo referendo escocés?
La primera ministra de Escocia, Nicola Sturgeon, fue rápida al declarar que el pueblo escocés ve su futuro como parte de la UE. Las 32 autoridades locales de Escocia respaldaron la campaña para quedarse en la Unión.
“Escocia ha hablado y ha hablado decisivamente”, afirmó. “Es democráticamente inaceptable sacarnos de la UE contra nuestra voluntad”.
Sturgeon dijo el viernes que la opción de un segundo referéndum sobre la independencia está sobre la mesa.
El ex primer ministro y líder del Partido Nacionalista Escocés (SNP, por sus siglas en inglés) Alex Salmond, arquitecto del referendo independentista de 2014 que terminó en una derrota de los nacionalistas, advirtió que una segunda votación era posible si el país era “arrastrado” fuera de la UE.
¿Unión irlandesa?
En tanto, el respaldo de Irlanda del Norte a la permanencia en la UE provocó un llamado del primer viceministro Martin McGuinness a una votación sobre la unión de Irlanda.
McGuinness le dijo a la televisora irlandesa RTE que el voto a favor del “Brexit” significa que “el gobierno británico ya no tiene mandato democrático para representar los puntos de vista del Norte en cualquier negociación futura con la Unión Europea y creo en que hay un llamado democrático para realizar una ‘votación sobre las fronteras’”.
Su partido, el republicano Sinn Fein, ha respaldado durante mucho tiempo una unión con la República de Irlanda, que también son parte de la UE, una postura que es rechazada por sus socios unionistas en el gobierno de Irlanda del Norte que quieren permanecer dentro del Reino Unido.