(CNN) – Este jueves Ted Cruz defendió su negativa de respaldar a Donald Trump durante su discurso en la Convención Nacional Republicana, diciendo que no tiene “el hábito” de apoyar a políticos que han atacad a su familia.
“No tengo el hábito de apoyar a personas que atacan a mi esposa y atacan a mi padre”, dijo Cruz en un encuentro en la mañana en que enfrentó fuertes preguntas de parte de la delegación de Texas en Cleveland.
Cruz se mantuvo con su decisión en un notable ir y venir de 25 minutos con sus propios constituyentes, desafiando las solicitudes de su propia delegación de Texas de poner al partido por encima de sus inhibiciones y respaldar a Trump.
Cruz evitó de forma sensacional darle su respaldo a Trump en su discurso el miércoles, lo que le valió un coro de abucheos de parte del público mientras era eclipsado en el juego de poderes por el candidato republicano.
En un dramático desarrollo, mientras Cruz terminaba su discurso, Trump de repente apareció en el estadio Quicken Loans Arena en Cleveland. Se unió a fu familia en la zona VIP y levantó su pulgares, un gesto que transmitía una clara ira hacia el comportamiento del senador de Texas.
Cruz, que quedó de segundo en las elecciones primarias del partido, pronunció el nombre de Trump solo una vez —para felicitarlo—y en su lugar habló sobre la marca del conservatismo que lo hace querido entre la base del Partido Republicano.
“Felicito a Donald Trump por ganar la nominación anoche”, dijo Cruz. “Y, como ustedes, quiero ver que los principios de nuestro partido prevalezcan en noviembre”.
Pero mediante se hacía claro que Cruz iba a terminar su discurso sin apoyar a Trump, los delegados empezaron a abuchear y algunos gritaron “¡Queremos a Trump!”.
“No se queden en casa en noviembre”, dijo Cruz hacia al final de un discurso que hasta entonces había sido bien recibido. “Pónganse en pie y hablen y voten a conciencia”.
Mientras los delegados empezaron a protestar, la esposa de Cruz, Heidi, fue acosada por seguidores de Trump que gritaban ”¡Goldman Sachs!” y debió ser escoltada de salida por personal de seguridad. Heidi Cruz, quien es empleada de Goldman Sachs, de negó a responder preguntas de los medios.
El impactante teatro político entre los dos rivales en las primarias republicanas expuso las divisiones en el partido que la convención presuntamente debía curar, y sugiere que Cruz cree que Trump perderá en noviembre.
La aparición de Cruz en la convención de Cleveland había sido objeto de intensa anticipación por su actitud hacia trump, después de sus roces personales al final de la carrera de las primarias.
Cruz recibió ovación cuando caminaba hacia el escenario en un discurso que parecía ser un intento para establecerlo como un guardián de los valores conservadores que algunos activistas dudan que Trump comparta.