(CNN) – Un policía de Chicago puede verse abriendo fuego contra un Jaguar negro que huye por una calle. El auto se estrella. El conductor sale del auto y los oficiales lo persiguen hasta un callejón entre casas de ladrillo. Entonces se escuchan varios disparos.
“¡Abajo! ¡Las manos detrás de tu espalda! ¡Nos disparaste, hijo de…!”, acusan uno de los oficiales.
Momentos después, los oficiales insultan al joven Paul O’Neal de 18 años mientras lo esposan boca abajo. Sus manos están en su espalda, sus brazos parecen debilitarse. La parte trasera de su espalda está cubierta de sangre. Un oficial pone uno de sus pies sobre el joven.
O’Neal murió de sus heridas.
El tiroteo, que ocurrió el 28 de julio, no había sido divulgado en video debido a que la cámara del oficial que le disparó en un principio no grabó el momento en que se abrió fuego. Sin embargo, la policía dice que uno de los oficiales que disparó contra O’Neal por la espalda violó el protocolo. El joven no estaba armado.
El video, que fue dado a conocer el viernes, causó que la ciudad de Chicago advirtiera sobre posibles disturbios y violencia contra la policía.
Un video ‘impactante y perturbador’
Sharon Fairley, jefa de la junta de supervisión de la policía que dio a conocer el video, describió las tomas como algo “impactante y perturbador”.
La familia del joven vio el video en privado, antes de que fuera dado a conocer al público el viernes, dijo Ja’mal Green, un vocero de la familia, en declaraciones a CNN.
“Una vez que los disparos comenzaron, inmediatamente dejaron la habitación, llorando”, dijo Green sobre la reacción de los familiares del joven.
O’Neal llevó a la policía a través de una persecución por la zona sur de Chicago. Él era sospechoso de robar un auto. El oficial que disparó las balas que le quitaron la vida al joven estaba en un auto que se estrelló con el Jaguar que conducía O’Neal.
Se investiga si el choque influyó en que la cámara no pudiera grabar el momento en que se realizaron los disparos, de acuerdo con la policía. Los investigadores también están investigando si el oficial apagó la cámara.
A pesar de lo perturbardor del video, Fairley dice que el video “no es la única evidencia que se reunirá y analizará cuando se realice una evaluación justa y completa de la conducta de los oficiales de la policía al realizar sus tareas”.
Tres oficiales han sido suspendidos.
La familia de O’Neil presentó una demanda civil contra los oficiales, alegando que ellos dispararon contra el joven “sin ninguna excusa o justificación legal”.
El tiroteo fue el último incidente similar que resalta la ya deteriorada relación entre la policía y la comunidad.
La ciudad todavía recuerda el tiroteo de Laquan McDonald, tras el cual un policía de Chicago enfrenta cargos de asesinato un año. El video de dicha muerte fue dado a conocer con una demora de un año.
Además, a principios de este año, una evaluación realizada por la alcaldía derivó en un reporte que acusó a la policía de racismo generalizado.