(CNN) – En apenas 26 horas, la Policía de Chicago se ha visto envuelta en dos casos de oficiales disparándoles a civiles. Y en ambas ocasiones los tiros fueron mortales. El más reciente ocurrió en la madrugada de este viernes, a eso de las 12:25 a.m., cuando la Policía de Chicago le disparó –y mató– a un hombre que, según los oficiales, había baleado a otras dos personas, asesinando a una de ellas.
La información fue reportada por el superintendente encargado, Kevin Navarro, en una rueda de prensa durante la mañana del viernes. “Mientras patrullaban el distrito 11, los oficiales oyeron algunos disparos y acudieron al parque Harrison & Central, donde vieron que un sujeto estaba sobre otra persona y le disparaba. Los policías se bajaron de su vehículo, lo comprometieron y le dispararon fatalmente”, explicó Navarro.
Un poco más de 24 horas antes, un sargento de esta ciudad segó la vida del joven de 19 años, Kajuan Raye, cuando le disparó a las 11:07 de la noche del miércoles, en el barrio Englewood, después de una persecución.
Los dos oficiales se encuentran desempeñando labores administrativas, mientras la Autoridad Independiente de Revisión de Policía investiga los tiroteos. Situaciones que se presentan una semana después de que otro policía también le disparara mortalmente a un hombre el pasado viernes 18 de noviembre, antes de la media noche.
El caso de Kajuan Raye
Un policía de Chicago reconoció que le disparó a un joven negro, después de que este le apuntara dos veces con un arma. Sin embargo, hasta ahora los investigadores no han encontrado la pistola, de acuerdo a lo informado por las autoridades. La víctima murió producto de los disparos.
La Policía está investigando los hechos que rodearon la muerte de este joven de 19 años, identificado por su familia como Kajuan Raye. Esta situación se presenta tras meses de fuertes escrutinios en el departamento de Policía de la ciudad por cuenta de las presuntas extralimitaciones de algunos oficiales en casos de tiroteos y disparos.
“Aún no hemos podido ubicar el arma (de Raye)”, aseguró el superintendente de Policía, Eddie Johnson, a los reporteros este jueves. “Todavía hay muchas preguntas sin resolver y estamos trabajando diligentemente para encontrar esas respuestas”, agregó.
El tiroteo
La Policía sostiene que el miércoles, a altas horas de la noche, un sargento fue llamado para acudir a una intersección cerca al Parque Ogden, al lado sur de Chicago, por un informe relacionado con “agresión en curso”.
Cuando el sargento llegó al lugar, un hombre, que según él coincidía con la descripción del sospechoso (y que terminó siendo Raye), empezó a correr. El oficial emprendió la persecución, según la información de la Policía.
“Entonces, el sargento le dijo a los investigadores que, mientras lo perseguía, el agresor se dio la vuelta y le apuntó con un arma en dos ocasiones”, relató Johnson.
El sargento le disparó al hombre, matándolo, agregó el superintendente.
Durante esa noche, los investigadores revisaron el área, pero no encontraron el arma que supuestamente tenía Raye, informó Johnson.
La Policía tampoco ha revelado el nombre del sargento, quien será retirado del patrullaje y se le asignarán tareas administrativas al menos por 30 días. Este es el protocolo para tratar los casos de los oficiales involucrados en tiroteos, mientras se revisa el caso.
El video grabado por dos cámaras de seguridad afuera de una iglesia muestra el momento en que Raye está corriendo y el policía lo persigue, reportó la afiliada de CNN WLS. Sin embargo, las imágenes no registraron el tiroteo.
Los abogados de la familia piden acusación
Los familiares de Raye dicen que él no poseía ningún arma, reportó WLS.
Raye, nacido en Dolton al sur de Chicago, era “un joven feliz, divertido y amoroso, que tenía un futuro brillante por delante”, aseguraron sus familiares en una declaración publicada por la firma de abogados Montgomery Law, compañía que está representando a la familia en el caso.
La familia de Raye “está con el corazón destrozado porque su hijo murió en menos de un oficial de policía que no valora la santidad de la vida de los hombres negros”, se lee en el comunicado. “Como ciudad seguimos luchando ante una Policía que tiene miedo y tiene prejuicios profundamente arraigados contra la juventud negra”, agregó la declaración.
La familia le ha pedido a sus abogados “investigar, obtener respuestas y responsabilizar a este oficial y al Departamento de Policía de Chicago”, reveló el comunicado.
Uno de los abogados de la firma, Jay Payne, le dijo a CNN que era absurda la afirmación de que Raye apuntó con un arma, dado que no la encontraron cuando registraron el área.
Payne agregó que, cuando el oficial lo abordó, Rayne estaba esperando un bus con uno de sus primos.
“Le pediremos al fiscal del condado de Cook que procese a este oficial”, insistió el abogado.
Policía de Chicago, en la mira por los disparos
La muerte de Raye se produce más de dos años después de que otro policía de Chicago le disparara al joven de 17 años, Laquan McDonald, un caso que despertó reformas y protestas y, en últimas, ayudó a motivar un diálogo nacional sobre el uso de la fuerza por parte de los oficiales.
Por algún tiempo, la muerte de McDonald no fue reconocida. Sin embargo, un juez ordenó al departamento de Policía revelar las imágenes de la cámara que contradecía el relato del oficial sobre los disparos.
Justo antes de que el video fuera publicado en noviembre de 2015, el oficial de la Policía de Chicago Jason Van Dyke fue acusado de homicidio en primer grado por el caso de McDonald. El funcionario se declaró inocente y está esperando su juicio. Van Dyke fue el primer oficial de Chicago en enfrentar cargos por este delito desde 1980.
El entonces superintendente de Policía, Garry McCarthy, fue despedido por el alcalde de Chicago Rahm Emanuel este año. Además, la Autoridad de Revisión de la Policía Independiente, agencia encargada de investigar los tiroteos en los que estén investigados los policías, está siendo revisada.
Años de desconfianza
Emanuel creó un Grupo de Trabajo de Responsabilidad de la Policía como respuesta a la exigencia pública de rendición de cuentas y transparencia, después de que el video de los disparos contra McDonald fue revelado.
En abril, un informe de este grupo aseguró que la policía “no tiene en cuenta la santidad de la vida cuando se trata de personas de color”. Y añadió que ha aislado a los negros e hispanos a través del uso de la fuerza y de un prolongado código de silencio.
En los últimos 8 años, el 74% de las personas asesinadas o heridas por la Policía de Chicago eran afroamericanas, sostuvo el reporte.
El grupo de trabajo, que incluyó a cinco residentes de Chicago que han liderado el sistema judicial, también encontró que el 72% de las personas detenidas por la policía de la ciudad en 2014 eran afroamericanos y el 17% eran hispanos.
Para abordar la gran cantidad de problemas sistemáticos dentro de la Policía de Chicago, la fuerza de tarea recomendó casi 100 transformaciones. Emanuel ha anunciado la implementación de casi un tercio de esos consejos, incluyendo el reemplazo de la Autoridad Independiente de Revisión de Policía por una agencia que tenga “más independencia”.
Con información de Marlena Baldacci, Steve Almasy, Ray Sanchez, Marilia Brocchetto, Emanuella Grinberg and y Kirkos.