(CNN) – Los fanáticos de los Dolphins de Miami abuchearon al mariscal de campo de los 49ers de San Francisco, Colin Kaepernick, cuando llegó este domingo al campo del Hard Rock Stadium en Miami Gardens, Florida.
Esto no solo porque los 49ers se enfrentaron al equipo local de Miami, sino también por los comentarios de apoyo que había hecho el jugador de la NFL hacia Fidel Castro, considerado por la gran comunidad de exiliados cubanos como un opresor brutal.
Kaepernick está acostumbrado a ser abucheado. Ha enfrentado una racha de controversias desde el pasado mes de agosto cuando decidió quedarse sentado durante el himno nacional en un partido de pretemporada de la NFL, a manera de protesta.
Luego del juego, llegó a una conferencia de prensa usando una camiseta en la que se representaba un encuentro entre Fidel Castro —que en ese momento estaba vivo— y Malcom X, el líder pionero y activista de la comunidad negra en Estados Unidos, que fue asesinado en 1965.
Durante una entrevista con reporteros en Miami el pasado miércoles, Kaepernick defendió su decisión de usar esa camiseta, según el columnista del Miami Herald, Armando Salgado.
En una conferencia de prensa, el jugador de la NFL habría elogiado a Castro por invertir en el sistema de educación de Cuba, a diferencia de la inversión en el sistema de prisiones de Estados Unidos, según Salguero.
El mariscal de campo les habló a los periodistas luego de la victoria de los Dolphins de Miami 31-24 contra los 49ers de San Francisco, y aseguró que sus comentarios fueron sacados de contexto.
“Estoy de acuerdo con la inversión en la educación. También estoy de acuerdo con la inversión en la atención de la salud gratuita universal, así como la participación para ayudar con el fin del apartheid en Sudáfrica”, dijo Kaepernick.
“Esperaría que todo el mundo esté de acuerdo con que esas son cosas buenas. Y traten de presionar la falsa narrativa de que apoyo las cosas opresivas que él hizo, y eso no es cierto”, añadió. “
Kaepernick también ha sido ampliamente criticado este mes. Él no votó la reciente elección, diciendo que sería “hipócrita” emitir un voto.