(CNN) – Una gran ola registrada en el Atlántico Norte ha batido todos los récords en cuanto a tamaño.
La ola, de 19 metros, captada entre Islandia y Reino Unido el 4 de febrero del 2013, impuso un nuevo récord mundial para la ola más grande jamás registrada por una boya, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
El anterior récord, de 18 metros, también se había medido en el Atlántico Norte en diciembre del 2007.
Con cuatro veces el tamaño de un autobús de dos pisos, la OMM dijo que la gran ola ocurrió con el paso de un “frente frío muy fuerte” que produjo poderosos vientos, de hasta 80 kilómetros por hora.
La organización añadió que el retraso en confirmar el nuevo récord se debió al tiempo que tardaron en analizarlo, cruzar datos y verificarlos.
“Esta es la primera vez que registramos una ola de 19 metros. Es un récord impresionante”, dijo en un comunicado Wenjian Zhang, secretario general adjunto de la OMM.
La altura de una ola se define como la distancia desde la cresta hasta la parte baja de la siguiente.
La boya que registró la ola forma parte de una extensa red que, junto con barcos y satélites, monitorean los océanos y los pronósticos de “peligros meteorológicos”.
Zhang explicó que capturar una ola de este tamaño pone de manifiesto lo importante que son estas observaciones para proteger las vidas de tripulantes y pasajeros en viajes por mar.
“Necesitamos registros de los océanos de alta calidad y extensión para que nos ayuden a entender las interacciones clima/océano”, añadió.
Aseguró, además, que, a pesar de los grandes avances en la tecnología satelital, las boyas aún juegan un rol muy importante en la recolección de datos en lugares de difícil acceso.
A pesar de quedar en el registro, esta ola se queda corta en comparación con la de 23 metros que surfeó el hawaiano Garret McNamara en noviembre del 2011 en Nazaré, Portugal.