(CNNMoney) – Facebook ha sido reacio a la hora de admitir que se convirtió en una organización de noticias. Y no en cualquiera: es tal vez la organización de noticias más importante.
Sólo hasta el final de 2016, un año en el que la compañía se vio obligada a encarar el fenómeno de historias falsas en su plataforma, el fundador y director ejecutivo Mark Zuckerberg se refirió a Facebook como una “compañía mediática”.
Y en 2017, el papel que desempeñe Facebook como difusor de noticias enfrentará un escrutinio mucho más intenso.
Este miércoles, cuatro personas de Chicago arremetieron contra un hombre con necesidades especiales: lo ataron, amordazaron, golpearon y torturaron. Toda la paliza fue transmitida a través de Facebook Live, permitiendo que hombres y mujeres de todo el mundo pudieran ver el acto de violencia en tiempo real.
El servicio de Facebook Live –que la empresa ha venido promocionando en anuncios de televisión y en vallas publicitarias como una manera de compartir videos divertidos o inspiradores– ahora está siendo usado como un medio para transmitir tortura.
Como era de esperarse, el video fue eliminado. “No permitimos que las personas celebren o exalten crímenes en Facebook y, por esta razón, el video original fue removido de la plataforma”, le explicó un portavoz de la compañía a CNNMoney.
Aún así, el gigante de las redes sociales reconoce “los desafíos únicos del video en vivo”. Después de todo, al ser transmisiones en directo son prácticamente imposibles de detener antes de que empiecen.
Esta situación implica un dilema para Facebook: ¿simplemente dejará que todo el contenido de una transmisión en vivo se exponga en la plataforma o asumirá las responsabilidades que vienen con el hecho de ser una compañía de noticias y contratará editores que puedan supervisar el contenido y decidir en tiempo real qué es importante, qué tiene un interés periodístico y qué debe eliminares por ser contenido inapropiado?
Los estándares de Facebook no prohiben ni la tortura ni la violencia completamente. “En muchos casos, cuando las personas comparten este tipo de contenido lo hacen con la intención de condenar la violencia o de aumentar la conciencia sobre ella”, aseguró el portavoz. “En ese caso, el video sería permitido”, añadió.
Un ejemplo de Facebook Live como herramienta para crear conciencia ocurrió en julio pasado. Diamond Reynolds, una mujer de la zona de Minneapolis, transmitió en vivo el momento en el que un policía le disparaba a su prometido, Philando Castile, durante una parada de tráfico. Inicialmente, la plataforma eliminó el video, pero lo volvió a publicar luego de un corto tiempo. Días después, ciudadanos de Dallas usaron la función de Facebook Live para mostrar cómo la Policía fue emboscada por un terrorista doméstico.
Las políticas de Facebook sobre el contenido han ido más allá de las decisiones éticas sobre la transmisión y han llegado al terreno de investigar a sus usuarios. A raíz del ataque terrorista de San Bernardino en 2015, Facebook intensificó sus esfuerzos para eliminar a los usuarios que apoyaban a grupos terroristas.
El mes pasado, Facebook, Twitter, Microsoft y YouTube revelaron que planean crear una base de datos compartida que los ayude a rastrear y eliminar “imágenes violentas de terrorismo o videos de reclutamiento terroristas”. Esta base de datos incluiría las “huellas dactilares” en el mundo digital de las imágenes y videos. Lo que, según estas compañías, les permitiría identificar el potencial contenido terrorista con más eficiencia.
Sin embargo, estas acciones despiertan algunas preguntas. ¿Ayudó Facebook a las autoridades a encontrar a los sospechosos en este caso? ¿Explotará los datos que tiene sobre ellos? ¿Qué podrían hacer con esa información?
El vocero de Facebook aseguró que la compañía no discute casos específicos y se negó a contestar preguntas concretas sobre el uso que le daría a los datos de los sospechosos.
Facebook, que se aproxima rápidamente a los 2.000 millones de usuarios mensuales, es una gran fuente de noticias, información y, ahora, de videos en vivo para personas alrededor del mundo.
Aún así, en cualquier momento, también se puede convertir en un canal que transmite crímenes violentos, así como un testigo clave en la investigación de esos delitos. Además, todavía no ha presentado una explicación coherente de cómo planea asumir ese papel.